"Lo de ses Covetes es polémica para una minoría absoluta"

Sus aficiones son el fútbol, montar en bicicleta, pádel y salir con los amigos. Se define como "muy casero". En el pleno de anteayer se emocionó al referirse a sus padres, novia, abuelo y otros allegados. En facebook ha recibido decenas de felicitaciones. En la calle también no paran de darle la enhorabuena y animarle. Ayer se le veía algo nervioso. Era su estreno en el despacho de alcaldía.

—¿Cuál es su primera impresión al ocupar la alcaldía?

—En primer lugar nos tenemos que situar. Esto es nuevo para no-sotros. Los ediles de +Acció conocen más el funcionamiento y el nuevo grupo del PP no tiene la misma experiencia política. Hay ilusión y ganas de cara a aprender mucho y trabajar al máximo.

—El día después del pleno del 11 de junio, en el que fue investido alcalde el líder de Campos pel Canvi, Joan Juan, con el apoyo de +Acció pese a no haber firmado pacto previo, usted manifestó que el PP asumía su papel en la oposición y que no habría moción de censura.

—Cierto, aunque se demostró que un gobierno de tres regidores de CpC tenía serias dificultades y no había capacidad para alcanzar una estabilidad. Se precisaba una solución. Se tenía que dar un paso y negociamos con +Acció. El PP tenía la obligación moral de formar gobierno. Nos sentamos y vimos que podíamos trabajar juntos, realizando renuncias y esfuerzos importantes ambos partidos. El pacto goza de bastante sintonía y ahora los ediles de +A también ayudan a los del PP a adaptarse en el poder.

—¿Se ha sentido respaldado por la exnúmero uno del PP, Margalida Ginard, y por los vecinos en el último mes y en la culminación del entente con +Acció?

—Desde el primer momento de mi candidatura. Ha habido buen trabajo en equipo y he disfrutado de libertad. Respecto a los vecinos, mucho calor y apoyo de la gente, incluso me ha resultado difícil moverme en plena calle.

—La Justicia sentenció que el pleno en el que fue investido Juan fue legal. ¿Pedirá perdón?

—No tenemos que pedir disculpas a nadie. En ese pleno ocurrieron cosas extrañas y lo lógico sería que se respetase la voluntad de los regidores. A veces hechos legales no son justos ni éticos. En cualquier caso, esto es agua pasada y por el bien del pueblo debemos centrarnos en trabajar.

—¿Cómo se reformará la carretera que enlaza con la autopista de Llucmajor; autopista o desdoblamiento?

—Creo que la solución es un desdoblamiento porque consume menos territorio que una autopista, pero se tendrá que estudiar a fondo el proyecto. También se deberá promocionar el paso interior por el bien de comercios, panaderías y otros negocios.

—¿Es necesario el controvertido golf con hotel y otras edificaciones en Son Baco?

—Los campaners necesitan alguna cosa, hay que buscar soluciones y contar con la iniciativa privada. Un modelo que con tiempo y paciencia sea de calidad, que atraiga a gente con poder adquisitivo. Asimismo, potenciar los agroturismos y las viviendas vacacionales y el desarrollo hotelero en diferentes zonas de sa Ràpita previsto en el Plan Territorial aprobado por todos. También promocionar Campos como ´Villa Termal´ al tener el único balneario de Balears, si bien su situación en ANEI condiciona determinadas actuaciones.

—¿Qué pasará con los 69 apartamentos inacabados y abandonados de ses Covetes?

—Sobre este asunto repito que acataremos las sentencias judiciales, velando en consecuencia por el cumplimiento de la Ley.

—¿Le puede influir negativamente el hecho de que su padre sea precisamente uno de los empresarios del grupo que representa a la promotora de la urbanización fallida de ses Covetes?

—Los resultados electorales conseguidos por el PP lo dejaron claro de forma contundente. Lo de ses Covetes es polémica para una minoría absoluta.

—¿Habrá menos tensión política en las calles de Campos?

—Juntos debemos normalizar la situación, evitar tanta rivalidad.