La cascada de alegaciones retrasa hasta 2024 la parte detallada del Plan General de Palma

La cantidad de recursos no permiten aprobar a tiempo el Plan de Ordenación Detallada, que decae en octubre

La situación provoca que en Palma coexistan dos normativas urbanísticas distintas con veinte años de diferencia, con la inseguridad jurídica que ello conlleva

"Nosotros ya advertimos de que esto podía pasar", alega el nuevo equipo de gobierno

Irene R. Aguado

Irene R. Aguado

Cerca de mil alegaciones presentadas a la parte detallada del Plan General de Palma, algunas de ellas traducidas en contenciosos administrativos en los tribunales, han provocado que el texto no se pueda aprobar a tiempo y se retrase, por lo menos, hasta mediados de 2024.

Así lo ha explicado esta mañana en rueda de prensa el regidor de Urbanismo, Óscar Fidalgo, que ha recordado que el Plan de Ordenación Detallada (POD) decae en noviembre, fecha en la que entrará en vigor el plan de 1998. De esta manera, dentro de dos meses empezarán a coexistir en Palma dos normativas urbanísticas aprobadas con veinte años de diferencia.

Lagunas urbanísticas

Esta situación, ha explicado Fidalgo, genera deficiencias, contradicciones y lagunas en materia urbanística en la ciudad, y por tanto mucha inseguridad jurídica en lo que respecta a la regulación del suelo en la ciudad. Como se recordará, el Plan General de Palma define el futuro urbanístico del municipio para los próximos 20 años y se divide en dos partes: la estructurante (que define las líneas maestras y la filosofía de la normativa y se aprobó definitivamente en abril) y la detallada (la llamada POD, que configura calle a calle los usos y características de cada espacio de Palma).

Este segundo documento, la parte detallada del plan, ha recibido cerca de un millar de alegaciones que, de ser aceptadas, modificarían de tal manera el texto original que habrá que volver a tramitarlo con otro periodo de exposición pública.

Más de un año

El problema es que los plazos, marcados por una Ley de Urbanismo de Baleares que establece que una vez aprobada la parte estructural el Ayuntamiento tiene hasta noviembre para ratificar la detallada, no permiten aprobarla a tiempo. Al texto en cuestión se le tienen que incluir las alegaciones y cambios, volver a pasar por un periodo de exposición pública (que Fidalgo prevé a mediados de 2024), un segundo periodo de alegaciones y la aprobación definitiva, lo que en total suma, como mínimo, más de un año.

Ahora, el objetivo del concejal de Urbanismo es dar seguridad jurídica y paliar las consecuencias de este embrollo. Fidalgo ha recordado que el Partido Popular se posicionó "radicalmente en contra" de la "aprobación en diferido" del Plan General precisamente por cuestiones como esta. La mencionada Ley de Urbanismo permite desde 2017 aprobar por separado la parte estructural y la detallada, a lo que se acogió el anterior equipo de gobierno del Pacte.

Los 'populares', entonces en la oposición, votaron en contra: "Nosotros ya advertimos de que esto podía pasar", ha lamentado Fidalgo. "Es una tormenta que no hemos provocado nosotros, pero vamos a tomar medidas para paliar los efectos de una técnica de ordenación urbana lamentable", ha sentenciado.

De hecho, según Fidalgo, en este momento hay seis recursos contenciosos administrativos contra el POD anunciados por parte de particulares y empresas, sobre los que el concejal ha preferido no pronunciarse por no estar todavía interpuestos. De estos seis recursos, cuatro se publicaron en el BOIB del 26 de agosto, hace escasos días.