La 'nueva' Bicipalma traspasará la vía de cintura para llegar a barriadas periféricas y densamente pobladas como Rafal Vell, Rafal Nou, Son Rapinya o la Vileta, el Terreno, Portopí y Ciutat Jardí, por poner algunos ejemplos, además de posibilitar su uso a los no residentes, puesto que ya no será necesario utilizar la tarjeta ciudadana.
El alcalde de Palma, José Hila, y el teniente de alcalde de Movilidad, Francesc Dalmau, han explicado esta mañana la puesta en funcionamiento del nuevo sistema que supondrá la total renovación de la flota actual de bicicletas públicas y su ampliación en cuanto a su número y de las estaciones.
El nuevo sistema ha sido adjudicado a la empresa Nexbike por un importe de 2,6 millones de euros. Se prevé que esté en funcionamiento dentro de este mismo año. El alcalde ha explicado que se trata de un proyecto cuya financiación se ha incluido en los fondos de recuperación europea, pendientes aún de aprobación, al igual que otros proyectos solicitados por un importe de 22 millones. No obstante, según el alcalde, en el caso de que el proyecto de Bicipalma no sea financiado por los fondos de Nex Generation, "la Societat Municipal d'Aparcaments (SMAP) empresa que desde este año lleva la gestión directa de Bicipalma, cuenta con suficiente capacidad para hacer frente a este gasto".
El uso del nuevo sistema de Bicipalma será más fácil que actualmente ya que solo hará falta descargarse una aplicación móvil y escanear un código QR para utilizar una de las bicicletas públicas. De esta forma los no residentes y turistas tendrán más fácil su utilización puesto que hasta ahora debían darse de alta en la tarjeta ciudadana u obtener un tiquet.
Tal como se especifica en el contrato, el nuevo servicio dispondrá de 800 nuevas bicicletas frente a las 290 actuales, lo que supondrá prácticamente triplicar la flota. Además 240 serán eléctricas y 560 mecánicas. Todas ellas dispondrán de un sistema de geolocalización, por lo que será más difícil su robo.
En cuanto a las estaciones, se pasará de las 37 actuales a 72, con la particularidad de que cinco de ellas serán móviles. De esta forma, se podrán ir colocando cerca de lugares en los que en algún momento determinado se realiza un evento, facilitado de esta forma su acceso mediante bici.
Los puntos de anclaje de las estaciones serán 1.440, lo que supondrá un 95% más que los actuales.
Dalmau ha manifestado asimismo que la firma del contrato con la empresa está pendiente de si se producen o no recursos ante el tribunal administrativo central de Madrid por parte de las dos empresas que se han presentado al concurso y no han sido seleccionadas. En cualquier caso, se prevé que tanto las nuevas bicis como las estaciones estén en funcionamiento a finales de este año.
El sistema actual es incompatible con el nuevo, por lo que se comenzarán a instalar las nuevas estaciones en los lugares que ahora no existen. Mientras tanto seguirán en funcionamiento las estaciones y las bicis que hay ahora. Habrá un momento de transición en el que se deberá suspender el servicio, aunque en estos momentos no se sabe cuánto tiempo durará.
