La concejala de Infraestructuras del ayuntamiento de Palma, Angélica Pastor, va a replantear el proyecto de iluminación de la Catedral con el fin de paliar su impacto y mejorar "las cuestiones estéticas" que no gustan a entidades como ARCA, asociaciones vecinales y a representantes de Patrimonio Nacional, que consideran que el nuevo proyecto minusvalora la fachada del Palacio de la Almudaina.
La prueba efectuada el miércoles por la noche con la colocación de provisional de báculos frente a la fachada principal de la Seu resultó fallida, no por cuestiones técnicas, sino "de estética".
La concejala, no obstante, no quiere que esta situación de indefinición se perpetúe y manifestó que "debe resolverse en tres o cuatro meses".
En caso contrario, si no se alcanza el consenso entre las partes implicadas, pese a que el proyecto cuenta con la aprobación de la comisión de Patrimonio del Consell y del Centro Histórico del ayuntamiento de Palma, la concejala afirma que se va a renunciar a su ejecución y se va a destinar el dinero del proyecto, que es aportado como "mejora" por la empresa adjudicataria del contrato de mantenimiento del alumbrado público, "a mejorar la iluminación en distintas barriadas de la ciudad".
Por su parte, la asociación proteccionista ARCA ha propuesto que se ilumine el conjunto patrimonial sin los báculos previstos tanto frente a la fachada principal de la Seu como en la plaza de la Almoina.
En la del Mirador ya se han sustituido los báculos originales por focos empotrados en el pavimento que, a petición de la coordinadora de Patrimonio de la Seu, Mercè Gambús, se han alejado de la fachada para no invadir la zona de protección exterior delimitada por Gaudí.
Además de renunciar a la instalación de todos los báculos porque "provoca una distorsión del paisaje urbano y su impacto visual es muy negativo", ARCA considera que se debe plantear una iluminación del todo el conjunto monumental y no solo de la Catedral, por lo que consideran que debe ser un proyecto conjunto que incluya a la Seu, la Almudaina, el Palacio Episcopal y la muralla.
Por su parte, el grupo municipal del PP ha solicitado al equipo de gobierno que el nuevo modelo de iluminación para la Seu "sea fruto del máximo consenso posible". Los conservadores consideran que la polémica generada por el nuevo proyecto "demuestra que el Ayuntamiento no ha buscado el grado máximo de aceptación con Catedral, los vecinos y entidades como ARCA".
Los báculos instalados para la prueba del miércoles ya han sido retirados.
