El Ayuntamiento paralizará todas las obras públicas que puedan interferir con el comienzo del curso escolar. Así lo ha anunciado este lunes el regidor de Infraestructuras, Rodrigo Romero.
Las áreas de Policía Local, Movilidad e Infraestructuras han decidido suspender las obras que puedan interferir en el retorno a las clases, de forma que no podrán comenzar antes de las diez de la mañana durante toda esta semana y la siguiente. Y otras no se podrán retomar hasta finalizada la jornada escolar.
De este modo se quiere facilitar la circulación de coches. "Sabemos que el comienzo de clase siempre es crítico, sobre todo, para padres y alumnos y para el resto de personas que llegan de vacaciones, por eso debemos agilizar en la vía pública el tránsito vehicular", ha afirmado el edil de Infraestructuras.
En estos momentos, hay 28 obras en marcha, la mayoría de mejora del alumbrado público, pero también de Emaya, ha comentado Romero.
Además, durante este verano se han realizado obras en 27 colegios públicos de Palma, con una inversión cercana a los 525.000 euros. Principalmente se han pintado y arreglado problemas de goteras y de accesibilidad y se ha renovado el pavimento en ocho centros, ha comentado Susanna Moll, regidora de Educación. Solo en pintura, Cort ha invertido 390.000 euros.
En dos colegios aun no han finalizado las obras, en el Jafuda Cresques y en Els Tamarells, aunque Moll ha asegurado que estos trabajos no interferirán con el comienzo de las clases.
Las reformas no han impedido la actividad de 43 escuelas de verano, que han ofrecido 15.000 plazas para niños.
El alcalde de Palma, Antoni Noguera, ha destacado que durante esta legislatura se habrá intervenido en las 45 escuelas públicas que hay en la ciudad, lo que supone pasar del "abandono" del anterior mandato a la "dignidad".
