Desde que hace un año al Asociación de Industriales de Mallorca presentó su proyecto de vivero de empresas, la iniciativa ha sido explicada con todos los detalles al Govern, el Consell de Mallorca y el ayuntamiento de Palma, destacando en estos encuentros que la idea coincide en objetivos con la Ley del Emprendedor de Bauzá, aportando la propia entidad privada el terreno, el capital de tres millones de euros para su puesta en marcha y desarrollo y una línea de crédito de un millón de euros para ayudar a los emprendedores gracias al acuerdo suscrito con Microbank. Según explica el director de Asima, el Govern mostró desde un principio su interés por la iniciativa y ofreció a los industriales el apoyo del director de la Oficina Presupuestaria. Al Consell también le gustó el proyecto, indica Alejandro Sáenz de San Pedro. Y Cort mostró igualmente su conformidad. Sin embargo, la preocupación de Asima es que ya han pasado diez meses desde que se alcanzó ese acuerdo y, aunque sus responsable son conscientes de que los cambios de calificación urbanística son lentos, reclaman al menos a Cort que haga algo y ponga en marcha el proceso, que mueva en sus despachos un proyecto generador de empleo en el que no se precisa financiación pública y que en estos momentos está pendiente del cambio urbanístico para ponerse en marcha, pues todos los demás aspectos ya se encuentran perfectamente definidos y presupuestados, incluido el proyecto arquitectónico y de urbanización.