La possessió de ses Cases de Son Ametler tendrá que esperar para recuperar su antiguo esplendor. Hace un año comenzó la primera fase de su reforma, consistente en la consolidación de la estructura del edificio, pero el equipo de Gobierno de Mateo Isern ha decidido no realizar nuevas inversiones el próximo año ante la falta de dinero en las arcas municipales. Por ese motivo, de momento, no está garantizada la continuación de esta remodelación, que incluye el saneamiento de la cubierta y las fachadas.

La inversión prevista en un principio para este plan era de cerca de un millón de euros, procedentes de los fondos de la Ley de Capitalidad que en Palma ascienden en su conjunto a unos 30 millones de euros. En la partida de ingresos de los presupuestos de este año no hay consignada esta cifra y el millón de euros previstos para estas obras no han sido transferidos. Es la misma situación con la que se encuentran las obras de mejora que debían ejecutarse en el edificio de Gesa donde tampoco están previstas inversiones.

La paralización de este proyecto supone que los vecinos del Rafal-Vivero se queden sin el casal de barrio y otros servicios que estaba previsto habilitar en este inmueble y por el que habían luchado desde hace años. Entre ellas un casal para la gent gran, una oficina de distrito, una biblioteca y un museo, que albergaría el espacio de la capilla que tiene este edificio.

El proyecto aprobado en la anterior legislatura, durante el mandato de Aina Calvo, incluía la construcción de un edificio anexo para destinarlo a un centro de día.

El grupo LMS Arquitectos ganó el concurso convocado por el ayuntamiento de Palma y se encarga de la ejecución de este proyecto de rehabilitación. Desde febrero del año pasado se está realizando el refuerzo de la estructura para conseguir paralizar el deterioro que ha sufrido en los últimos años debido a la falta de mantenimiento. Los profesionales de este grupo explican que ahora están trabajando en el ala norte de la possessió donde se encuentra la antigua capilla. Calculan que esta primera fase de consolidación finalice el próximo verano lo que supone unos meses de retraso ya que la exalcaldesa de Palma, Aina Calvo, aseguró el día de la colocación de la primera piedra en febrero del año pasado que las obras concluirían en otoño. El ritmo de ejecución está ralentizado.

Edificio catalogado

La Empresa de Obras y Proyectos Urbanos (EMOP) se encarga de la supervisión de este proyecto de remodelación que debe respetar los elementos antiguos y la estructura original ya que se trata de un inmueble en proceso de catalogación y debe ser protegido. Esta possessió agrícola y ganadera data del siglo XIII y cuenta con una extensión superior a los 2.700 metros cuadrados. Consta de planta baja, dos plantas, un aljibe, una capilla y un jardín decimonónico de más de 1.600 metros cuadrados. El futuro de las fases siguientes de este proyecto queda en el aire por falta de inversión. Una vez garantizada la solidez de la estructura la segunda fase debe centrarse en acondicionar el interior y la zona ajardinada. El aljibe tiene que reconstruirse para albergar una biblioteca junto a un casal de barri y la planta baja está destinada al casal de gent gran y una capilla- museo.