Entrebancs
Elecciones gallegas, y ahora ¿que?
Ilustración: Elecciones gallegas, y ahora ¿que? / DM
Los resultados de las recientes elecciones en Galicia, son a la vez claros y complejos. El PP ha obtenido unos excelentes resultados ; mientras sus adversarios, especialmente los socialistas, han obtenido malos resultados siguiendo tal tendencia negativa en la mayoría de CC AA.
El Presidente Nacional, Feijóo, planteó una campaña electoral más allá de la clara victoria de los Populares en Galicia. Su presencia fue permanente e intensa, durante toda la campaña. Su argumentación iba a reconfirmar su liderazgo interno. Unos malos resultados podían haber abierto una tensión insoportable dentro de la formación que le podría haber conducido a una nueva remodelación de la cúpula de su partido.
La presencia permanente de Feijóo, y el contenido de sus intervenciones, tenían (y siguen teniendo) un objetivo de mayor alcance: eliminar el sanchismo, romper la mayoría, plural y diversa del Congreso de diputados que apoya el gobierno de coalición de talante progresista; y, a su vez, «gestionar» la mayoría con Vox, que como mínimo puede retrasar las iniciativas y leyes aprobadas por el congreso de diputados. Otro campo de batalla son la mayoría de CC AA donde gobiernan los populares con Vox.
Ilustración: Elecciones gallegas, y ahora ¿que? / DM
La realidad política, económica y social nos obliga a llegar a acuerdos con partidos de naturaleza diversa
Tras el domingo Feijóo tiene dos caminos: endurecer su discurso y contribuir a la polarización en la que está la política española, acariciando las tesis de Vox, o recuperar el discurso con el que se presentó en abril del 2022 cuando fue elegido presidente.
Al escribir estas líneas, estando pendientes la aprobación de la ley referida a la amnistía, Sánchez tiene probabilidades de agotar sus cuatro año de legislatura. La mayoría de tema pendientes de regulación, son transversales. Nuestra vigente derecha está representada por el dueto PP/Vox en busca de una «moción de censura». Pero la realidad política, económica, social (global, europea, nacional, regional, local) nos obliga a llegar a acuerdos con partidos de naturaleza diversa. Práctica habitual entre los diversos parlamentos de nuestro entorno europeo.
Dejo para otro comentario, analizar los partidos ‘novedosos’, tanto en el polo progresista como en la derecha, que han obtenido unos resultados penosos y ninguna presencia. Vox (2,2%) Sumar (1,9%), Podemos (0,39%). Tiempo habrá para analizar la evolución de tales partidos, especialmente en el próximo proceso electoral relevante, las elecciones europeas.
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