Menorca, un caso de éxito

El pasado martes, un año más, tuve la fortuna de moderar el Foro de Energía más relevante y reputado de las islas.

Con ocasión del reciente relevo institucional contamos con la presencia de los máximos mandatarios del Govern, Consell de Mallorca y Ayuntamiento de Palma. La finalidad fundamental del evento no fue otra que conocer los objetivos prioritarios y principios rectores de la política energética balear para esta recién estrenada nueva legislatura.

Las intervenciones de los tres ponentes institucionales colmó todas las expectativas de los asistentes, manifestando de forma colectiva e individual el firme compromiso de todas las autoridades públicas por fomentar el diálogo interinstitucional y la colaboración público-privada con el fin de dar fiel cumplimiento al mandato establecido en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética de las islas Baleares, lo que supone alcanzar una penetración del 35% de energías renovables, de hoy al 2030; siendo el punto de partida una integración actual de tan solo del 8,7%.

En esta línea el edil Oscar Fidalgo asumió el reto de revertir la calamitosa política energética del anterior gobierno municipal que definió como “una política de renovables sin renovables”; como demuestra que la capital cuente en estos momentos con únicamente 31 MW instalados para una población de 500.000 habitantes, frente a los 60 MW en servicio en la isla de Menorca para una población de tan solo 98.000 habitantes. Consecuencia de este paupérrimo indicador de kilovatio renovable por habitante, el mandatario manifestó su firme compromiso por mejorar los indicadores ambientales y de sostenibilidad de una ciudad que desea presentarse al mundo como capital del turismo sostenible, asumiendo este gran reto tomando, entre otros ejemplos, como modelo y referencia experiencias como la del Distrito 22@ de Barcelona, destacando también la necesidad de apostar por tecnologías simples, fiables y baratas como la solar fotovoltaica a fin de evitar situaciones inverosímiles como la que supone tener, desde su millonaria adquisición, en una cochera los autobuses de hidrógeno por inexistencia de suministro del citado combustible.

Por su parte Jaume Fanals, Director Insular de Territori del Consell de Mallorca, manifestó que su departamento está trabajando en la normativa de desarrollo impuesta por el mandato de la Ley de Cambio Climático en materia de implantación de Energías Renovables y en este sentido está en permanente diálogo con los distintos consistorios de la isla. Asimismo, destacó que Mallorca cuenta con parques solares muy bien integrados en el paisaje y que esta es una de las cuestiones que debemos valorar sin perjuicio de mantener este nivel de excelencia para las futuras instalaciones. Fanals matizó que el dialogo interinstitucional se está desarrollando debidamente y con reconocimiento y asunción por parte de los ayuntamientos de los compromisos adquiridos por todos los municipios de la isla en base a los fondos europeos derivados del Pacto de los Alcaldes, que conllevan la obligación de fomentar la integración de las energías renovables en los municipios adscritos al Acuerdo y que, en nuestro caso, son todos los ayuntamiento de Mallorca. Ante la cuestión de si tanto la normativa insular menorquina como su pacífica aplicación en materia de renovables debería importarse a Mallorca, el Director de Territori manifestó que Menorca es sin duda un caso de éxito en materia de integración territorial de la energía solar fotovoltaica pero que la idiosincrasia de cada isla es diferente y que aquí estamos obligados a trabajar con parámetros similares pero no iguales.

El Director General de Energía, Diego Viu, expuso abiertamente que su cargo implica una enorme responsabilidad que asume gustoso y confiando en su equipo de colaboradores que le acompañan en esta travesía. En cuanto a la continuidad o no del proyecto islas 100% renovables impulsado en la legislatura anterior, manifestó que es un objetivo plausible y exigente pero que para ello es necesario trabajar en herramientas de agilidad administrativa y seguridad jurídica a fin de avanzar de forma fiable y definitiva hacia la seguridad y soberanía energética de las islas. Como mandatario autonómico valoró positivamente el modelo energético menorquín y la conveniencia de que el resto de actores energéticos asimilen las bases y pilares de un modelo de éxito. Sobre la posible implantación de una nueva central térmica en Mallorca manifestó que son cuestiones que atañen al principio de garantía del suministro eléctrico y que está sobre la mesa.

Finalmente, el Conseller Alejandro Sanz de San Pedro recalcó la necesidad de la acción individual en favor del colectivo. En su condición de Conseller de Empresa y Energía manifestó la preocupación de los empresarios por los costes diferidos de la energía y su preocupación por la reducción y mitigación de su huella de carbono, con carácter extraordinario en el sector turístico, razón de más para mostrar el apoyo del Gobierno balear a las energías renovables, sin duda las más limpias y baratas. En materia de autoconsumo industrial describió que la masiva existencia de amianto en las cubiertas de las naves está retrasando obligatoriamente las instalaciones en nuestros polígonos, pero que la Consellería está trabajando con sumo ahínco en esta línea de trabajo.

Así pues, queridos lectores, como han podido comprobar el pasado martes se hizo un repaso profundo e intenso de la materia que más condiciona el futuro de una sociedad y que no es otra que su Energía. Por mi parte solo me resta felicitar a todos los ciudadano e instituciones de Menorca por ser un gran ejemplo no solo para las otras islas sino también para toda Europa, quizás gracias a su modelo de éxito la Comisión Europea ha seleccionado a las islas Baleares para transformarlas en islas 100% renovables, a cuyo efecto la UE ha confeccionado un plan específico de apoyo integral y a todos los niveles para garantizar a los baleares una transición exitosa a un sistema de energía exclusivamente renovable.