Seis de los dieciséis heridos en el derrumbe del Medusa Beach Club siguen hospitalizados

Tan solo preocupa la situación de un holandés afectado por un traumatismo craneal grave ingresado en la Juaneda

Una imagen del traslado de una de las heridas en los primeros momentos del siniestro.

Una imagen del traslado de una de las heridas en los primeros momentos del siniestro. / Diario de Mallorca

Redacción

Cuando no habían transcurrido ni 24 horas desde el inesperado y trágico derrumbe sobre la terraza del Medusa Beach Club de la Platja de Palma que provocó cuatro muertos y al menos dieciséis heridos, tan solo seis de estos últimos permanecían ingresados en centros sanitarios, informó ayer el Servei de Salut.

El que se encontraba en un estado más preocupante es un holandés de 30 años que sufre un traumatismo craneoencefálico y que, dentro de la gravedad, se encontraba estable. Este afectado se halla ingresado en la Clínica Juaneda junto a otros dos afectados por el siniestro , un alemán de 34 años y un español de 39. Estos dos últimos se encontraban en observación y en planta con un estado que no hacía temer por su vida.

El grupo Quirónsalud tenía hospitalizadas a otras dos víctimas del derrumbe, un hombre de 35 años y una mujer de 24, ambos originarios de Holanda, que se encontraban en estado leve.

La sexta persona que continúa ingresada es una holandesa de 26 años que fue trasladada inmediatamente después del siniestro al hospital de Son Espases con un traumatismo torácico.

Al parecer, los servicios de emergencias sanitarias decidieron en el lugar del siniestro trasladar a esta persona al hospital de referencia al ser evaluado su estado porque podría precisar de una intervención quirúrgica y Son Espases, como hospital de referencia de esta comunidad autónoma, es el único centro que cuenta con un servicio de Cirugía Torácica.

No obstante, finalmente no será necesario que pase por el quirófano al tener «una contusión pulmonar y poco más», señalaron fuentes del servicio de Urgencias de Son Espases. Unas fuentes que añadieron que la paciente ingresó con la citada contusión y algunas heridas en cara y ojos aunque se encontraba «hemodinámicamente estable» por lo que preveían que en el transcurso de una semana como máximo sería dada de alta.

Estas fuentes añadieron que el servicio de Urgencias fue activado en los primeros momentos del siniestro cuando se les informó de que los heridos más leves serían trasladados a las privadas y a Son Llàtzer mientras que los más graves les llegarían a ellos. 

Solo llegó uno

En esos momentos, las previsiones cifraban en cinco los pacientes más graves que serían trasladados al hospital de la carretera de Valldemossa aunque finalmente solo llegó la citada mujer holandesa porque los otros cuatro ya habían fallecido.

Con respecto a los otros heridos, durante la jornada fueron dados paulatinamente de alta dada la poca gravedad de su estado. Eso es lo que ocurrió con los 8 ingresados en Son Llàtzer con policontusiones leves en la mayoría de los casos excepto una mujer que tuvo que ser asistida por una crisis de ansiedad. Y con un paciente extranjero que salió con el alta de Quirónsalud antes del mediodía. Aunque en los primeros momentos del siniestro se habló de dieciséis heridos, no todos ellos ingresaron en centros sanitarios. Al menos uno de ellos habría acudido por sus propios medios al cercano centro de salud de es Trencadors donde habría sido atendido y también dado de alta.

Psicólogos de apoyo

Cuatro psicólogos especialistas en situaciones de emergencias del Colegio de Psicología de Baleares (Copib) atienden desde el jueves a las víctimas del derrumbe de Playa de Palma y su entorno. Desde el Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Catástrofes (Gipec), la psicóloga Jennifer Prata resaltó el importante papel que juegan los profesionales de la psicología en situaciones de emergencia y catástrofes para que las víctimas afronten situaciones de alto impacto emocional.