Los inversores pagan hasta 500.000 euros por habitación al comprar hoteles en Mallorca

Más de medio millón de euros por habitación. Ese importe es lo que pueden llegar a pagar los inversores cuando compran un hotel en Mallorca, aunque en este caso se trate de un establecimiento de cinco estrellas, situado en un edificio singular de Palma, y dentro de la gama que se ha dado en llamar como ‘boutique’ por tratarse de instalaciones con una capacidad limitada y con elevados niveles de calidad en su servicio, según se pone de relieve desde la consultora CBRE. La directora de su oficina en Palma, Tonia Vera, subraya que la cotización de las instalaciones hoteleras de las islas es elevada, y pone de relieve que el precio medio que se está abonando por la adquisición de un cinco estrellas de carácter vacacional se mueve entre los 200.000 y los 300.000 euros por habitación.

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El último informe elaborado por CBRE subraya que el pasado año se cerró con un volumen de inversión hotelera en Baleares de 752 millones de euros, lo que convierte a las islas en la segunda autonomía con mayor peso en España, solo superadas por Canarias. Un dato a tener en cuenta: el importe obtenido en el archipiélago supone el 18% del total de la inversión registrada en el conjunto del país, o lo que es lo mismo, prácticamente uno de cada cinco euros destinados en España a la compra de hoteles ha recaído en Baleares.

Como referencia, indicar que más del 60% de la inversión hotelera contabilizada durante 2023 en las islas se concentró en Mallorca.

Hay un aspecto que es necesario destacar, y es que durante el pasado año la adquisición de hoteles estuvo concentrada en la oferta de calidad alta o muy alta, es decir, de cuatro y cinco estrellas.

36 hoteles comprados

A lo largo de 2023 consta la transacción de 36 activos hoteleros del archipiélago, según se destaca desde CBRE, y el 75% del capital invertido se destinó a la gama de las cuatro estrellas, a lo que se suma un 19% a las cinco estrellas y las cinco Gran Lujo, dejando un 6% restante a otras tipologías.

Como ejemplo de los desembolsos realizados, desde la citada consultora se señala el caso del hotel Palma Nobis Can Oliver, de cinco estrellas y 37 habitaciones, por el que se abonaron 20 millones de euros, superando la media de medio millón por habitación.

La lista incluye también el hotel TBH Sur Mallorca (Ses Salines), de cuatro estrellas y 198 habitaciones, cuya adquisición estuvo valorada en 33 millones de euros. Eso supone una media de 167.000 euros por habitación.

Otro ejemplo es el hotel Niágara de Palma, de cuatro estrellas y 142 habitaciones, cuya compra se valoró en 15 millones de euros, con una media superior a los 115.000 por habitación.

Ninguna de las transacciones del pasado ejercicio alcanzó el nivel del 7Pines Resort de Eivissa, de cinco estrellas y 185 habitaciones, la más importante de los últimos años en Baleares, por el que se pagaron 130 millones de euros en 2022, con una media superior a los 700.000 euros por habitación.

Recorte

Desde CBRE se apunta que los 752 millones de euros invertidos por la adquisición de establecimientos hoteleros de las islas suponen un recorte del 17% respecto al valor alcanzado en 2022, aunque hay que tener en cuenta el peso que la operación que se registró ese último año en la pitiusa tuvo en el balance final.

Esta evolución a la baja contrasta con el dato del conjunto de España, al haber sumado a nivel estatal una inversión de 4.100 millones de euros por la adquisición de 174 activos hoteleros y más de 21.000 habitaciones, unas cifras que han situado a 2023 como el segundo año con mayor volumen transaccionado de la serie histórica, tan solo por detrás de 2018. Al igual que en el caso balear, son los establecimientos de alta categoría y del segmento vacacional los que generan un mayor interés entre los inversores.

Entre las operaciones registradas durante el pasado ejercicio en el ámbito nacional, se destaca el peso que han adquirido las grandes transacciones de portfolios, es decir, de paquetes en los que hay más de un establecimiento de alojamiento. Uno de estos casos corresponde a Baleares.

Mas demanda que oferta

El descenso interanual que aparece en la inversión hotelera de Baleares no supone que se haya registrado una pérdida de atractivo, según pone de relieve Tonia Vera. Bien al contrario, lo que se está dando en las islas es que la demanda de establecimientos de calidad es superior a la oferta existente en el mercado.

O lo que es lo mismo, si hubiera más hoteles de cuatro y cinco estrellas a la venta en el archipiélago, los números hubieran sido superiores porque existe un enorme interés en contar con este tipo de propiedades.

La explicación se encuentra en el excelente momento que atraviesa la actividad turística, y sobre este punto se recuerda que en 2023 se alcanzaron cifras récord de visitantes en Baleares.

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