El sindicato CCOO destaca la mejora de las mujeres tras la reforma laboral

 El sindicato Comisiones Obreras ha presentado esta mañana el informe anual sobre las desigualdades y brechas de género de las mujeres en el mercado laboral de Baleares. El estudio ha sido presentado por las representantes del sindicato, María Ángeles Aguiló y Eva Cerveriña.

El informe destaca las ventajas que ha representado la última reforma laboral para la inserción laboral de las mujeres. Gracias a esta reforma, se ha aumentado la estabilidad del empleo, pero sobre todo el número de mujeres asalariadas ha alcanzado una cifra récord. Aún así, todavía existe una amplia brecha con respecto a las condiciones salariales que disfrutan los hombres, frente a las mujeres.

Durante los últimos meses, la composición del empleo femenino ha mejorado de forma sustancial. Lo demuestra el dato de que 66 de cada 100 contratos son indefinidos, pero a la vez también se han reducido la contratación temporal.

Pero a pesar de la situación laboral de las mujeres ha mejorado, el sindicato CCOO afirma que el empleo femenino sigue sufriendo una situación de discriminación laboral con respecto a los hombres. Es decir, el mercado laboral sigue sesgado por razón de género. Y es que las mujeres tienen una menor inserción laboral y de mucha menor duración que los hombres. Esta situación se debe a que muchas mujeres se ven obligadas a apartarse del mercado laboral, para dedicarse a una labor de cuidados. Es decir, dedican una parte de su vida laboral al cuidado de sus hijos o de sus familiares. Según las cifras actuales, en estos momentos hay más de 72.800 mujeres en Baleares en esta situación de inactividad.

Hostelería y servicios

Según las estadísticas oficiales, 78 de cada 100 mujeres trabajan en los sectores de hostelería y servicios, pero especialmente en este último. Son especialidades donde los sueldos son más bajos y donde todavía existe una gran brecha entre lo que cobra una mujer y lo que percibe un hombre por el mismo precio. Aunque se trata de datos de hace tres años, las mujeres tenían un sueldo medio de 22.443 euros al año, frente a los 26.271 euros de los hombres. Además, el hecho de que las mujeres mejoren en su formación profesional, no se ha conseguido terminar con esta discriminación salarial, ni tampoco se consigue mejorar la promoción profesional.

Existe una gran diferencia en cuanto a la formación. Así, por ejemplo 47 de cada 100 mujeres en Baleares tienen estudios superiores. En el caso de los hombres la cifra es de 32.

El sindicato alerta en su informe que la discriminación por razón de sexo en el mercado laboral después repercute sobre las pensiones. Así, la pensión media de jubilación de las mujeres es 284 euros inferior a la de los hombres. Cuando se trata de pensiones de incapacidad, la diferencia de la pensión se sitúa en 84 euros. No pasa lo mismo con las pensiones de viudedad, ya que las mujeres cobran más dinero que los hombres.

El sindicato considera necesario continuar trabajando para terminar con la explotación y precariedad en el empleo femenino, ya que estas situaciones repercuten después en situaciones de desigualdad social.

Con respecto a la población de Baleares que en estos momentos está apartada del mercado laboral la cifra se sitúa en 385.000 personas. Algo más del 55% de esta tasa son mujeres. Y es que en los dos últimos años el número de féminas que se apartan del mercado laboral ha ido en aumento, según los datos que maneja Comisiones Obreras. De este porcentaje específico, casi el 19% de estas mujeres que no están incluidas en el mercado laboral es porque se dedican a las labores de hogar. En cambio, el porcentaje de hombres dedicados a la misma actividad en casa es de apenas un 5,3%.

El estudio del sindicato mayoritario también destaca que la tasa de desempleo femenina se ha reducido en algo más de un punto en los últimos años. En cambio, el porcentaje de los hombres sin empleo ha aumentado. El grupo de edad donde la tasa de paro es más elevada es entre los 16 a los 24 años. Por primera vez en los últimos años, la tasa de paro de larga duración es más alta en los hombres que en las mujeres. Hasta el año pasado la situación era al revés.