Llorenç Córdoba se niega a dimitir y culpa de este "chantaje" al PP de Mallorca

Los consellers exigen que deje todos sus cargos por pedir un sobresueldo en el Consell y en Palma debido a que «está arruinado» | El todavía presidente reconoció ante sus socios de Sa Unió que necesitaba dinero e insiste en que ha sido «chantajeado»     

Los consellers, durante la rueda de prensa. |

Los consellers, durante la rueda de prensa. | / C.C.

Carmelo Convalia

Tras varios días de incertidumbre, los partidos que forman el equipo de gobierno del Consell de Formentera de Sa Unió (PP y Compromís), explicaron ayer en rueda de prensa los motivos de fondo que, según su versión, han llevado a Llorenç Córdoba a actuar de «forma unilateral» para crear «una cortina de humo» con supuestas razones políticas que nadie acababa de entender. El presidente anunciaba la pasada semana que se planteaba retirar el apoyo «incondicional» como diputado autonómico a Marga Prohens.

Óscar Portas, junto a sus compañeros de Sa Unió, explicó en una rueda de prensa posterior a los actos de conmemoración de la Constitución, que el verdadero motivo de Córdoba para iniciar esta crisis de gobierno es que «ha pedido sobresueldos tanto al Consell de Formentera como a la propia presidenta del Govern, Marga Prohens, porque está arruinado».

El presidente del PP insular, José Manuel Alcaraz, precisó por su parte que lo que gana Córdoba como presidente y diputado asciende a 80.000 euros al año, pero que el presidente les había comunicado que «no le llegaba, por lo que necesitaba del orden de entre 3.000 y 4.000 euros más al mes para vivir, que es lo que me pidió a mí personalmente», añadió Alcaraz.

La versión de Llorenç Córdoba difiere bastante de la ofrecida por sus exsocios de gobierno. De hecho, a última hora de la tarde, al acudir a una concentración de una veintena de personas en su apoyo frente al Consell, negó un interés económico en toda esta crisis: «Lo que han dicho es falso, es un ataque personal y se ha visto. Ellos mismos han admitido que se había planteado echarme fuera de la presidencia».

Recordó que primero le ofrecieron irse de la presidencia y quedarse como diputado para, una semana después, pedir su dimisión de ambos cargos: «Esto tiene un nombre y es chantaje, me han estado chantajeando y no hay una razón clara por la que tenga que dimitir».

Admitió que su situación económica no es buena: «Sí, me cuesta llegar a final de mes a mi y a mi familia», pero luego se preguntó: «¿Es un delito y una razón para dimitir? Igual lo tengo que aprender y dimitir por esto, pero es la única razón que han expuesto». Recordó que horas antes, Sa Unió le pidió que dejara sus cargos «en prensa, pero no pienso dimitir hasta que tenga una razón por la que se demuestre que lo tengo que hacer. Me ha elegido el pueblo de Formentera y tengo que responder ante él».

«Sólo pido los gastos»

En su defensa, añadió: «Tengo un sueldo y unas dietas globalizadas y por ahí no ha habido ningún problema, solo digo que no se están compensando los gastos que tengo para ir a Mallorca, solo pido eso». «En ningún caso estoy muerto de hambre ni desnutrido, intento pagar los estudios de mis hijas en el sitio que sea mejor y que me han pedido y lo puedo hacer. Han usado la palabra arruinado porque quieren. No me sobra el dinero, pero lo único que han podido hacer con esa comunicación [de Sa Unió] es demostrar que no soy corrupto, si lo fuese no buscaría una fórmula para compensar estos gastos».

Al ser preguntado sobre si pensaba emprender acciones legales, dijo: «No me lo planteo, aunque me lo han propuesto. Es una intromisión en el honor, me duele por mi familia; mi mujer y mis hijas no tienen que ir con la cabeza baja por una cosa que no ha hecho su padre o por defender su trabajo y pedir en Palma».

A su juicio, Sa Unió le ha echado de la coalición y «desde Mallorca también de los grupos del PP; todo ha sido una cosa organizada por el PP de Palma y ayudada desde aquí por Sa Unió. Lo digo claro: ha sido una estafa a los ciudadanos de Formentera. Presentar a un independiente para que ganara las elecciones y luego a las primeras de cambio retirarle de la forma más rastrera posible».

Para sus ex socios de gobierno, Córdoba «es una persona que se encuentra en una situación desesperada, y una persona desesperada acaba actuando de forma desesperada». Por ese motivo, el pasado viernes le pidieron «en privado» que dimitiera, a lo que se negó, y ayer lo hicieron en público: «Pedimos al presidente, Llorenç Córdoba, que presente la dimisión como presidente del Consell de Formentera y como diputado en el Parlament».

Ante la gravedad de esta situación, Sa Unió contactó el martes con los grupos de la oposición, GxF y PSOE, para explicar «la verdad de todo lo que está ocurriendo». Querían advertirles de que Córdoba había creado «una cortina de humo mediática para sacar un beneficio personal».

Se dejaron manipular

Los consellers reconocieron durante la rueda de prensa que se dejaron «manipular fácilmente» por Córdoba, alguien en quien habían confiado incluso en la oposición, durante el anterior mandato.

No fue hasta el viernes 1 de diciembre cuando, en la reunión que convocó Córdoba para dar explicaciones a los consellers, les trasladó su problema económico, detallan.

Portas pidió «disculpas a todo el pueblo de Formentera» y después reconoció que Sa Unió, «somos los culpables de la situación y lo somos porque fuimos nosotros quienes confiamos en Córdoba».

Esa confianza, subrayó, fue tanto para encabezar el Consell como para ser diputado en el Parlament: «Pedimos disculpas por no haber sabido ver hasta dónde podía llegar el presidente».

También indicaron que cuando les reunió y les quiso explicar su órdago al Govern, «no entendíamos nada», hasta que «todo empezó a tener más sentido» cuando les comunicó que su situación económica era muy delicada. «Nos dijo, literalmente, que estaba arruinado, y que había estado pidiendo aquí y en Palma que le encontraran otro sueldo», aseguró Portas. Incluso la semana de las polémicas declaraciones «llegó a pedir [dinero] a la propia presidenta Prohens», desveló.

Ayer, Sa Unió tramitó «la expulsión de Córdoba de la coalición política Sa Unió, con lo que pasará a ser conseller no adscrito».

Concentración de apoyo a Córdoba

El presidente del Consell de Formentera agradeció anoche el apoyo de unos veinte vecinos queacudieron a una concentración en la puerta del Consell, tras ser expulsado de Sa Unió y después de la petición de dimisión de los dos partidos que forman la coalición, PP y Compromís.

Delante de las pancartas reconoció que en estos momentos se siente «aturdido, decepcionado y asimilando la intención [de Sa Unió de echarle] aunque la manera en la que lo han hecho sigo sin entenderla». El presidente y diputado en el Parlament avanzó que pensaba «dar las explicaciones pertinentes porque no tengo que esconder nada, no he hecho nada que estuviese mal».

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