Los servicios de salvamento de Baleares han recuperado 776 vidas desde 2005

El archipiélago ha registrado este año un descenso en la cifra de personas fallecidas y de incidentes de carácter grave

Servicio de salvamento en una playa de la isla.

Servicio de salvamento en una playa de la isla. / Manu Mielniezuk

EP

Los servicios de salvamento, rescate y socorrismo de Baleares han recuperado 776 vidas desde que se implantó en 2005 el decreto regulador de las medidas mínimas de seguridad y protección que deben cumplir las playas y zonas de baño de las islas.

El director general de Emergencias e Interior, Sebastià Sureda, presentó ayer la XXXI Jornada Técnica de Seguridad en Playas del archipiélago, en la que se expusieron los datos de la memoria de playas de 2023.

Las cifras demuestran que ha descendido considerablemente el número de personas ahogadas recuperadas (un total de 24 personas este año) debido a la rápida respuesta de los servicios de vigilancia, que hace que las personas en riesgo se recuperen antes del agotamiento y del paro cardiorrespiratorio.

Esta cifra supone una bajada del 36,8% respecto a 2022 y de un 40% respecto a 2021. En este sentido, el jefe de Servicio de Emergencias 112, Joan Pol, consideró que los números son «de récord».

Incidentes graves

Asimismo, ha habido un descenso de los incidentes graves respecto al año anterior, pasando de 762 a 671. Por islas, las cantidades han sido de 411 en Mallorca, 103 en Menorca, 119 en Ibiza y 38 en Formentera. Se destacó que el dato es «un buen resultado», teniendo en cuenta que la temporada ha tenido muchos días aptos para baño, con temperaturas más altas de la media y con pocos días de temporal o mala mar, u otros riesgos como presencia de medusas o contaminación marina, entre otros.

Todo esto y la alta afluencia de turistas han hecho que muchas zonas de baño hayan estado al límite de su capacidad, con la exposición al riesgo, los servicios de salvamento más horas abiertos y una mayor ocupación de las playas, tanto en número de personas como en días de sol y playa, con un índice de máxima carga humana en Baleares un 5,04% superior al año pasado.

En cuanto al número de personas fallecidas, la cifra ha menguado, con un total de 36 (24 en Mallorca, cuatro en Menorca, siete en Ibiza y una en Formentera), diez menos que en 2022 y 12 más que en 2021.

Por otro lado, la cifra de personas fallecidas en la arena ha sido una, siete menos que en 2022 y tres menos que en 2021. Fuera del horario de servicio de salvamento, ha habido un total de nueve personas fallecidas, un caso más que en el año pasado y dos más que hace dos. En piscinas ha habido siete muertes, lo que hace un total de 43 ahogados en el medio acuático.

En relación a la cantidad de personas trasladadas al centro asistencial, los números no han variado mucho respecto al año anterior. En total han sido 540 casos, en concreto, 315 en Mallorca, 91 en Menorca, 96 en Ibiza y 38 en Formentera.

En resumen, este año se han realizado casi 1.291 intervenciones acuáticas con rescates en las playas de Baleares (un 28% más que el año pasado), de las que 902 se han producido por la falta de conocimiento del bañista; 402 han sido por corrientes marinas, 339 por fuerte oleaje y 161 por haberse alejado de la costa.

Otro dato que se refleja en la memoria es el número de incidentes por picaduras de medusas, que este año ha sido de 25.615, mientras que las asistencias por picaduras de pescado araña han sido de 321. Y es que, el número de avistamientos de celentéreos ha aumentado un 155,6% más que el verano pasado, con 3.119 casos.