El próximo concurso de traslados tensa aún más la convivencia entre docentes

El Sindicato SIAU anuncia que impugnará el proceso si se promueve que haya «funcionarios de segunda» y velará para evitar discriminaciones

Los interinos se manifestaron contra el plan de estabilización en la plaza de España de Palma.

Los interinos se manifestaron contra el plan de estabilización en la plaza de España de Palma. / Pere Joan Oliver

E. Press

El inicio del curso escolar se prevé caliente por el malestar generado entre parte del colectivo docente a causa de la adjudicación de plazas fijas a maestros y profesores, que ha supuesto incluso reproches entre los implicados. Si hace unos días el STEI advertía de que la situación puede ser «realmente peligrosa» para la cohesión de los claustros en las escuelas y ANPE reclamaba «responsabilidad» ante el «intrusismo» que han generado los profesores estabilizados en especialidades ajenas, ahora el Sindicato Independiente, Autónomo y Unitario (SIAU) amenaza con impugnar el próximo concurso de traslados docentes si se propicia que haya «funcionarios de segunda». Por su parte, el sindicato independiente docente de Balears (Sidib) insiste en que «por encima de la condición de funcionario están los derechos de las personas»

Aseguran que, desde diciembre del año pasado, dentro del sector de la enseñanza pública se ha ido cultivando un debate en torno a cómo se tendría que desarrollar el próximo concurso de traslados en el que participarán tanto funcionarios de carrera como funcionarios en prácticas, aunque precisan que en los últimos meses se han intensificado las discrepancias en torno al sistema que se tendría que emplear a la hora de obtener un primer o nuevo destino definitivo.

Recuerdan que el Tribunal Supremo concluyó que «la valoración de los servicios prestados como funcionario de carrera, personal fijo, y como funcionario interino o personal de duración determinada, no pueden ser objeto de valoración diferente».

Ante este escenario, el sindicato considera «extremadamente irresponsable» que algunas organizaciones sindicales promuevan «la división y el engaño» dentro del colectivo docente, «haciendo creer que de cara al próximo concurso de traslados hay margen legal para establecer la adjudicación de centros en dos turnos diferenciados, que los funcionarios de carrera procedentes del concurso de méritos concursen con cero puntos o que no se valore la experiencia acumulada como funcionario interino».

Frente a ello, esta organización se compromete a «velar porque en Balears también se cumpla el marco legal actual pero sobre todo para que no se alimente ninguna división entre el colectivo docente». Además, dejan claro que si no se cumple la normativa y finalmente se opta por «discriminar» a una parte de los docentes «tenemos claro que impugnaremos la convocatoria».

«Todos somos docentes»

«Los docentes no somos mejores o peores según la forma en que hayamos accedido a la función pública. Todos somos docentes y, como en el resto de profesiones, la diversidad es riqueza. La implicación, el esfuerzo y la capacidad de un docente no se miden con unas oposiciones aprobadas, donde hay centenares de variables que acaban influyendo, se valora en el día a día de la profesión», subrayan.

«Ni un solo sindicato ni tampoco la conselleria de Educación pidieron nunca al Ministerio que modificara la normativa estatal para que los procesos de estabilización se desarrollaran de manera distinta», critican a la vez que apuntan que «tal vez» esto se debió a que a otros sindicatos «ya les iba bien que estos procesos fueran una auténtica chapuza para poderse beneficiar».

Por otro lado, el Sidib afirma asistir estos días con «asombro» a las manifestaciones constantes del llamado grupo de Funcionarios Docentes Unidos de la «injusticia» que les parece que en el próximo concurso de traslados que se hará el próximo noviembre la totalidad de las personas estabilizadas por el último proceso extraordinario puedan participar del mismo contando con la totalidad de puntos que puedan tener, por su formación, experiencia, expediente académico, etcétera y que no lo vayan a hacer partiendo con cero puntos, que es lo que ellos considerarían «justo».

«Antes de todo, de la condición de funcionario, de si se aprobó por oposición o por algún otro medio, los derechos de una persona como trabajador están por encima de todo, porque los trabajadores, antes que nada, son personas, y quienes pretenda hallar justificación a una injusticia en la manera de acceder a un lugar de trabajo están perdiendo de vista el aspecto humano de la cuestión y están mirando de justificar un privilegio», sentencia el Sidib.