Los alumnos critican la docencia de la UIB durante el curso de la covid

Los alumnos de grado no quedaron satisfechos con la docencia que recibieron en la Universitat cuando se suspendieron las clases presenciales por la irrupción de la pandemia el curso 2019-2020.

En una encuesta realizada en 2021, los alumnos valoraron varios ítems sobre los estudios de grado con una nota del 1 al 4 en la que 1 suponía estar ‘nada satisfecho’ y 4 ‘muy satisfecho’. En global, el grado de satisfacción del alumnado durante el Estado de Alarma no llegó al 2,5, quedando por debajo del valor central.

Entrando al detalle, lo que peor valoraron los estudiantes de aquel periodo fue el volumen de trabajo global de todas las asignaturas del curso; así como que el nivel de competencias y objetivos adquiridos no llegó a lo que estaba previsto. También quedó por debajo de la mediana «el interés y la preocupación que ha demostrado el profesorado por su aprendizaje en esta situación excepcional».

La encuesta también planteaba a los estudiantes que puntuasen la siguiente afirmación: «La nueva situación ha sido una oportunidad para potenciar el aprendizaje autónomo», sentencia que tampoco alcanzó la mediana aritmética (ni durante la suspensión de las clases del curso 2019-2020 ni tampoco durante el curso 2020-2021).

Del periodo del confinamiento y de las clases suspendidas sí han valorado los materiales y recursos ofrecidos así como la información dada por la UIB y los responsables de la titulación sobre las nuevas condiciones académicas que se impusieron. Por los pelos ‘aprueba’ la pregunta sobre la comunicación que recibieron sobre los cambios en los criterios de evaluación.

Un total de 2.554 alumnos de grado cumplimentaron esta encuesta, lo que representa un 21% del total de estudiantes.

El Servei d’Estadística i Qualitat Universitària (SEQUA) es el departamento que realiza este tipo de estudios de forma periódica. Confecciona las encuestas, recoge los datos, y después los trabaja y recopila en informes que pueden consultarse en la web de la UIB. En el caso de las encuestas a estudiantes el objetivo es conocer su opinión y detectar los puntos fuertes y débiles de los planes de estudios. Los indicadores que quedan por debajo del valor central aparecen marcados en rojo.

Al margen de este periodo excepcional en la fase inicial de la pandemia, el resto de cursos analizados que aparecen en este último informe publicado el pasado marzo (figuran datos del curso 2015-2016 en adelante) obtienen puntuaciones por encima de la media. El curso 2020-2021, cuando la crisis sanitaria aún coleaba y la UIB combinaba clases presenciales con online, el ítem que mejor valoración obtuvo fue el seguimiento de la guía docente por parte del profesor (con una valoración media de 2,99) así como la información disponible en la web de la titulación; el aula digital y los servicios de orientación y apoyo a los estudiantes.

La relación entre el esfuerzo requerido y el cómputo en créditos fue el indicador peor valorado (2,4), seguido de la coordinación entre materias (2,54). El grado de satisfacción con lo aprendido se quedó en un 2,74 y el grado de satisfacción global en un 2,72.

Docentes: Sí valoran el trabajo de los estudiantes en esta fase

Mientras los alumnos han sido más críticos con las clases recibidas durante el Estado de Alarma, el profesorado sí se muestra satisfecho con las competencias adquiridas y los objetivos alcanzados por los estudiantes durante esta fase (la nota media es de 2,94) así como con los aprendizajes realizados en este periodo. Mirando el histórico de encuestas, lo que peor valoran los docentes es el nivel con el que llegan los estudiantes a la UIB, si bien la mediana ha mejorado algo: del 2,31 de 2015 al 2,6 en 2021.

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