La diputada del Partido Popular y periodista Cayetana Álvarez de Toledo presentó ayer su libro Políticamente indeseable junto al periodista Xavier Pericay en el Hotel Melià Victoria de la mano del Círculo Mallorquín.

Álvarez de Toledo expresó su gratitud por poder presentar el libro en Mallorca porque es uno de sus lugares favoritos del mundo: «Aquí tomé la decisión de entrar en política y también me llamaron para ser destituida como portavoz en el Congreso”.

En relación a la última guerra interna del PP, declaró que «los trapos sucios nunca se lavan y se acaban acumulando en casa hasta que caen los cimientos». Para ella, uno de los grandes problemas de Occidente es la ausencia de grandes líderes capaces de convocar a los ciudadanos y encumbró al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, del que dijo que ha «conseguido torcer el curso de la historia europea».

La política criticó la degeneración de la política «azuzada por los sentimientos» y propugnó que los ciudadanos deben «decir aquello que no tienen que decir».

Uno de los grandes problemas de la actualidad, dijo, son el «victimismo y el infantilismo», que han convertido a las sociedades en «sometidas», y puso de ejemplo el «feminismo radical que convierte a las mujeres en víctimas».

La escritora afirmó que el origen de la batalla cultural está en la educación y apuntó que uno de los grandes problemas de la política actual es que «ha dejado de respetar la verdad e intima con la mentira».

Ademas, argumentó que para recomponer los partidos grandes hay que incorporar voces diferentes y libres porque los partidos son cada vez más cerrados: «De tanto tratar a la gente como tonta, se acaba produciendo un divorcio entre la política y la inteligencia».