Manifestación de los sindicatos por los derechos de trabajadores y clientes de CaixaBank

Los representantes de los trabajadores de CaixaBank de los sindicatos Unió Obrera Balear (UOB) y de Sindicat Independent de Balears (SIB) se manifestaron ayer a mediodía frente a la sede de la entidad en Palma para defender los derechos de los trabajadores y también los de los clientes.

Según avanzaron ayer por la mañana en una nota de prensa, el motivo de la concentración ante la sede de CaixaBank era «exigir un trato humano para la plantilla de Balears y nuestros clientes».

Los sindicatos recordaron que llevan mucho tiempo «denunciando las presiones y amenazas, con faltas de respeto y educación, a que se ve sometida la plantilla» de Balears y aseguraron que en los últimos meses «la presión comercial desencadenada y desatada que reciben a diario los trabajadores de CaixaBank se ha hecho insoportable y angustiosa, y supera con creces el umbral del estrés aceptable al trabajo». «Es absolutamente imprescindible que los retos sean asumibles y, sobre todo, transmitir las órdenes con respeto y educación», añadieron.

Por eso, reclamaron «volver a nuestros orígenes» para asegurar un futuro con unas condiciones tan buenas como habían tenido en el pasado y «pensar más» en todos los clientes de la entidad bancaria y en sus necesidades.

Concentración de trabajadores

Por otra parte, los trabajadores de CaixaBank se concentran hoy frente a la sede de la entidad en Palma para protestar por la situación actual de la plantilla, que han calificado de «insostenible».

Según informó CCOO ayer, se trata de una protesta a la que se suman otras once ciudades españolas, como Barcelona, Bilbao, Burgos, Las Palmas, Madrid, Murcia, Pamplona, Sevilla, Tenerife, Toledo y Valencia. El sindicato explicó que el motivo de la concentración se debe al «nivel de tensión comercial extremo y déficit de plantilla tras las salidas del Expediente de Regulación de Empleo (ERE)», lo que les hace estar «de nuevo en el punto de mira de la opinión pública y con la plantilla dando la cara ante clientes por decisiones que toma la dirección del banco».

Asimismo, advirtieron que la subcontratación de servicios financieros incide en la «exclusión y precarización» del empleo y la atención a la clientela, «contribuyendo a elevar negativamente el riesgo reputacional». Por ello, consideraron que la entidad «debe garantizar servicios e inclusión financiera con empleo estable de calidad».