La delegada del Gobierno en Balears, Aina Calvo, respondió ayer a las críticas surgidas durante estos días por los hechos del viernes y admitió en una entrevista concedida a Onda Cero que lo ocurrido en Son Sant Joan ha sido un hecho «insólito, único y sin precedentes» que va a provocar cambios importantes y obligatorios en los protocolos de seguridad del aeropuerto para que no vuelva a ocurrir.

Calvo insiste en todo momento en que «no se podía prever» y defiende la actuación policial. En este sentido, la delegada del Gobierno expresó que tiene constancia de que haya habido una «descoordinación» entre los agentes implicados. Según explicó, el protocolo que se debe seguir en el caso de que ocurra un aterrizaje por urgencias médicas contempla la custodia de la ambulancia por parte de las autoridades policiales, pero no la del avión. Por tanto, en este punto estaría el problema que propició la huida de los 24 pasajeros que iban a bordo del avión de Air Arabia Maroc.

Asimismo, Aina Calvo aseguró en esa misma entrevista que en ningún momento se ha planteado su dimisión y confiesa que se siente apoyada por el Govern pese a las últimas noticias que reflejan algunas desavenencias con Armengol.