La plataforma Conservació Falzies Palma (CFP), en colaboración con el Colegio de San Agustín y el Consorcio para la Recuperación de la Fauna de Baleares (COFIB), ha soltado esta mañana 15 ejemplares de vencejos (Apus apus), desde la azotea de la Iglesia de Ntra. Sra. del Socorro.

El acto formaba parte del proyecto que surgió, durante la cuarenta de 2020, como una iniciativa para la recuperación de este ave en los espacios urbanos de Palma. Para ello, se realizó un censo del número de vencejos en la ciudad, se localizó las zonas que solían concurrir y se comenzó a construir cajas nidos para ellos. "Cada año perdemos sitios para que ellos puedan nidificar", explica Yaima Espinosa, representante de CFP. "Lo ideal sería tener bloques o tejas, que ya tuvieran cajas nidos habilitadas, como en otras partes de Europa".

La organización busca crear conciencia en la ciudadanía sobre la importancia que tienen la especie aviar dentro del paisaje urbano y sonoro, y asegurar una población reproductora saludable. "Es un ave que migra desde África, pone sus pollos y se va. Cada año regresan al mismo sitio, si somos capaces de guardar ese sitio, será genial para ellos".

Suelta de los vencejos en la iglesia del Socors de Palma. B. Ramon

El rector de la Iglesia, el fray Jesús Miguel asegura que acogieron el proyecto "muy bien". La colaboración eclesiástica, ha consistido en ceder los tejados de la capilla para habilitar las cajas nidos. Además, a partir del próximo curso escolar se ofrecerán talleres educativos en el colegio, de tal manera que los alumnos de Infantil y Primaria conozcan la realidad del pájaro en la ciudad y conecten con la naturaleza en la urbe. Fray Jesús Miguel también ha animado a las otras iglesias de Palma a colaborar con el proyecto ecológico. "Hemos sido los pioneros".

Al evento también ha acudido el conseller de Medio Ambiente, Miquel Mir, que ha asegurado que "En la ultima década, el COFIB ha rescatado aproximadamente ha 5.000 ejemplares que han sido alimentados, criados y liberados al medio nuevamente". Al ser un ave que permanece en Baleares poco tiempo (final de primavera - inicios de verano), normalmente, lo que se rescatan son polluelos que han caído de los nidos y aún no pueden volar. Una vez que alcanzan los 30 gramos, aproximadamente, son puestos en libertad. Despegan desde el suelo, por tanto, lo "ideal" es cogerlos de las patas para que las alas queden libres, darles impulso y que alcen el vuelo. Mir también ha comentado que es "emocionante" celebrar este acto justamente ahora, ya que el vencejo "ha sido declarado ave del año", este 2021, por la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife).