La Policía Local de Palma ordenó anoche la suspensión de un concierto con más de un millar de jóvenes, que se celebraba con autorización administrativa en la plaza de toros, porque se incumplían las medidas de seguridad preventivas frente a la pandemia de covid-19.

Según han confirmado fuentes del cuerpo municipal de seguridad, agentes de la Patrulla Verde e inspectores del Govern accedieron al recinto sobre las 22 horas, después de recibir varias llamadas alertando de que cientos de jóvenes bailaban sin mascarillas y sin mantener la distancia de seguridad sobre el ruedo.

La fiesta juvenil, en la que actuaron varios artistas de música de reaggae, había sido autorizada con la condición de que los participantes permanecieran sentados en la grada y sobre el coso.

Uno de los artistas que participaron en el concierto, Maikel de la Calle, colgó un vídeo en el que se aprecia a los jóvenes bailando en el ruedo, sin guardar distancias, y muchos de ellos sin mascarilla.

La Policía levantó acta de las infracciones apreciadas por los agentes, quienes ordenaron a los organizadores que instasen a los asistentes a abandonar el recinto, lo que se llevó a cabo sin incidentes.