Un equipo de investigadores del Departamento de Química de la Universitat de les Illes Balears (UIB) propone el uso de una metodología holística basada en liposomas para predecir los efectos de la exposición humana a contaminantes emergentes, aquellos que aún no han sido sometidos a regulación. Desde la Universitat plantean utilizar estas nanopartículas sintéticas para anticipar el impacto de sustancias nocivas en términos de bioacumulación y biodisponibilidad en el organismo, sin tener que recurrir a test 'in vivo'.

Los contaminantes emergentes son compuestos químicos que llegan al medio ambiente con la actividad de origen humano y que tienen impacto sobre el entorno, pero que aún no han sido regulados por las autoridades, detalla la UIB. Para estudiar los efectos de algunas de estas sustancias contaminantes sin tener que recurrir a test en seres vivos, desde la UIB ha utilizado liposomas, unas vesículas lipídicas sintéticas de tamaño nanométrico que permiten introducir moléculas en las células mediante la fusión con la membrana celular.