Uso generalizado de mascarillas, respetar la distancia de seguridad, tener a disposición geles hiperalcohólicos para lavarse las manos, limpiar cada uno de los centros de trabajo, así como las herramientas o equipos de trabajo y llevar un registro diario de los trabajadores que acuden a las empresas. Estas son algunas de las medidas comunes de los protocolos de prevención y protección -colectiva e individual- contra el coronavirus que tendrán que seguir las empresas y trabajadores de empleos no esenciales -comercio, transportes, construcción, recogida de residuos, seguridad y vigilancia y limpieza- que se reactivarán a partir del martes en Mallorca. Para todos estos ámbitos se han redactado protocolos específicos, un total de seis documentos. Así lo anunciaron ayer el conseller de modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela y el director del Ibassal, Rubén Castro. Un paquete de medidas que responde a las exigencias que el viernes alegaron desde Comisiones Obreras, y que da por cubierto al acuerdo llegado el jueves, 8 de abril, en la última reunión mantenida de diálogo social, donde las patronales CAEB y PIMEB, y los sindicatos CCOO y UGT manifestaron la necesidad de aumentar la seguridad.

"El uso generalizado de mascarillas individuales deberá garantizarse tanto en aquellos empleos donde es posible mantener una distancia de seguridad de dos metros y, también, de una forma más especial en aquellos donde no es posible", apuntó Negueruela, que subrayó que "aquellas empresas que no puedan garantizar el uso generalizado de mascarillas pueden seguir acogiéndose a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTEs)". El abastecimiento de estas mascarillas depende directamente de las propias empresas.

Asimismo, señalaron que esta medida se incluye en los protocolos desarrollados por el Instituto Balear de Seguridad y Salud Laboral (Ibassal) y la Consellería de Salud y Consumo para poner en marcha protocolos de seguridad de cara a reforzar la prevención en los sectores y actividades no esenciales.

Además del uso de mascarillas, el presidente del Ibassal, Rubén Castro, apuntó que los protocolos elaborados exigen "reforzar la higiene individual". Así, los trabajadores deberán tener a su disposición geles hidroalcohólicos para lavado de manos. En caso de no ser posible, "las empresas deberán facilitar el uso de agua, jabón antiséptico y papel secante". La limpieza de las zonas de trabajo deberá intensificarse y extremarse, así como de las herramientas, utensilios o equipos de trabajo. Una medida que no va dirigida solamente al evitar el contagio directo, sino también el indirecto.

En el documento de los protocolos, de acuerdo con las indicaciones de la autoridad sanitaria, se requiere llevar un registro diario de los trabajadores que acuden a las empresas. Se trata de una norma para, en caso de detectar un posible positivo de coronavirus, "seguir la cadena de contagios".

Antes de su reincorporación al empleo, todos los trabajadores tendrán que responder a un cuestionario, elaborado con preguntas concretas en función del sector. La finalidad de este cuestionario, que realizan la Dirección General de Salud Pública y Participación y la Ibassal, de forma coordinada con los servicios de prevención de las empresas y las mutuas colaboradores, es hacer un seguimiento de las actuaciones para garantizar el control y la seguridad de la población, en relación con el Real Decreto del Estado de alarma para la gestión de la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19.

Sector de la construcción

El documento específico del sector de la construcción sigue las pautas propuestas desde Madrid. Se contempla, por ejemplo, que "en el caso de transporte o desplazamiento de mercancías, podrán ir en la cabina dos trabajadores siempre que sea necesario", según explicó ayer Castro. En el resto de transportes, no obstante, "podrá ir un trabajador por cada una de las hileras".

El objetivo, han concluido tanto Castro como Negueruela es "no solo proteger a los trabajadores, si no también al conjunto de la población que sigue confinada en sus hogares".

El Pi

El Pi pide al Govern que no se olvide de la población de riesgo, y reclama que ésta pueda tener acceso a las mascarillas homologadas a través de la red de farmacias utilizando su tarjeta sanitaria. Asimismo, El Pi también insta al Ejecutivo de Francina Armengol a planificar la distribución de los equipos de protección individual para que todo el mundo pueda tener uno mientras dure el desconfinamiento progresivo, una medida que, según la propuesta del partido político, debería consensuarse con el colegio de farmacéuticos.

La presidenta interina de El Pi, Xisca Mora, apunta que esta distribución tendría que hacerse "escalonadamente para evitar aglomeraciones en las farmacias", así como priorizar a los colectivos más vulnerables y a los que trabajen fuera de casa. "En una primera fase, tienen que tener mascarilla todos los trabajadores esenciales; en una segunda fase, la población de riesgo; y, por último, toda la población en general", concreta Mora.

Otra de las propuestas que la formación anunció ayer en un comunicado, es que la primera mascarilla que se ofrezca a la población de riesgo sea gratuita, y que la adquisición de una segunda mascarilla ya sea de pago. Aun así, en la opinión del partido que preside Xisca Mora lo más importante es que el Govern garantice el proveimiento de los equipos de protección individual que, según anunció ayer Negueruela, serán obligatorios para todos aquellos trabajadores no esenciales que vuelvan a sus empleos en los próximos días.