La Mesa del Parlament rechazó ayer la petición de amparo de Vox por el rechazo de la conselleria de Educación a permitir que los diputados de la ultraderecha visitaran los centros escolares en horario lectivo. Vox había enviado un escrito a la Mesa por el que instaba al presidente de la Cámara, Vicenç Thomàs, a que fuera él quien estableciera el día y hora de las visitas. La Mesa acordó por unanimidad que "la Conselleria o el titular del servicio es el órgano competente" para establecer "el tiempo y forma" de estas visitas.

La Mesa también rechazó, en este caso con la abstención de los representantes de PP y Cs, la petición de Vox de que los escritos que se enviaran a su grupo parlamentario estuvieran también en castellano, y no solo en catalán.