La oficina del Ibavi en la calle Manuel Azaña está desbordada. Ciudadanos que solicitaron la ayuda al alquiler en la convocatoria 2018 rodean este lunes el edificio en una larga cola. Son principalmente aquellos cuyas solicitudes han sido rechazadas y acuden en tropel para tratar de subsanar los errores que ha encontrado la conselleria de Vivienda en la documentación que presentaron.

Cabe recordar que el Govern se encontró con una demanda récord, casi cinco mil familias solicitaron acogerse a las subvenciones que otorga la Administración. Después de que se cerrara el plazo, el 31 de octubre, la semana pasada el Instituto Balear de Vienda (Ibavi) contactó vía SMS a los solicitantes para informarles de que ya se había publicado la lista de deficiencias de las ayudas de alquiler.

Los interesados tienen que acudir a la sede del Ibavi en el que se especifica la razón por la que se rechaza su petición y tienen hasta el martes 19 de marzo para presentar la documentación necesaria para ver si logran una respuesta positiva y cobrar la subvención. Estos trámites se hacen de forma presencial, incluido pedir información sobre qué documentos adicionales hay que presentar, de ahí que la oficina y los funcionarios estén desbordados.

Las razones por la que se rechazan las solicitudes varían. Puede ser por no presentar el contrato de arrendamiento o bien que no está correcto, falta de recibos mensuales, del certificado de convivencia, que la fianza no está depositada en el Ibavi, o que no se acredita ser familia numerosa, discapacidad o ser víctima de violencia de género o de terrorismo, entre otras.

El Govern ha destinado una partida de 7,4 millones de euros que quintuplica a la de 2015, para repartir entre 4.909 solicitantes de la ayuda. Se subvencionará hasta el 50% de la renta, dependiendo de la situación socioeconómica de cada solicitante.

Este año, como principal novedad, han podido acogerse a la ayudas los inquilinos que paguen alquileres inferiores a 900 euros siempre que residan "en municipios que tengan un precio medio de 900 euros o más" .En ediciones anteriores las ayudas se dirigían únicamente a quienes pagaran 600 euros como tope, pero la burbuja de precios ha obligado al Govern ha adoptar una medida excepcional.