La conselleria de Medio Ambiente se adelanta a Emergencias y establece cuál será la respuesta de sus efectivos si se repitiera un nuevo episodio de inundaciones como la torrentada del pasado 9 de octubre en el Llevantinundaciones como la torrentada del pasado 9 de octubre en el Llevant. Con este paso, el conseller Vicenç Vidal toma la iniciativa pese a los planes de la dirección general de Emergencias de crear una agencia autonómica única para coordinar todos los efectivos ante un nuevo episodio como el de Sant Llorenç, incluidos los de Medio Ambiente.

En una instrucción del conseller Vidal publicada ayer en el boletín oficial (BOIB), se establece "las pautas o criterios de actuación para los cuales se deben regir los órganos, unidades administrativas y entes del sector público dependiente de la conselleria de Medio Ambiente", como son efectivos del Ibanat o Agentes de Medio Ambiente (AMAs), ante cualquier plan de emergencia civil, como el Inunbal que se activa ante los episodios de inundación.

Experiencia en incendios

Para ello, Medio Ambiente extiende el plan de respuesta en caso de incendio forestal, el llamado Infobal, al resto de emergencias. En la instrucción, la Conselleria justifica que "dispone de recursos operativos potencialmente movilizables para la activación de estos planes de emergencia" y que "puede participar dando apoyo a otros organismos en otras intervenciones no previstas en los planes de emergencia".

Esta instrucción, que supone que Medio Ambiente establece la coordinación de sus propios efectivos, choca con los planes de la dirección general de Emergencias, que planea la creación de una agencia autonómica que se encargue de la coordinación de todos los efectivos, tal y como propuso el director técnico del área, Joan Pol en su informe sobre la gestión de la riada en el Llevant. Pol proponía la creación de un ente público responsable de todo el ciclo de emergencias y que aglutinara todos los servicios de la comunidad, incluidos Agentes de Medio Ambiente o del Ibanat.

Cabe recordar que en ese mismo informe, Pol arremetía contra la conselleria de Medio Ambiente, especialmente contra la dirección general de Recursos Hídricos, denunciando que "su falta de implicación dificultó la labor". El director técnico de Emergencias también señalaba que el "Ibanat está diseñado para hacer frente a incendios forestales y que no dispone de personal y material adecuado para "trabajar durante la noche en este tipo de situaciones".

Tensión y acusaciones cruzadas

El informe de Pol abrió una guerra con Medio Ambiente, que rápidamente empezó a redactar un contrainforme en el que le acusó de "intentar crear una cortina de humo para descargarse de su responsabilidad" y con el que denunciaba que "nadie se puso en contacto ni con el Ibanat ni con la dirección general de Recursos Hídricos" y que "fueron el gerente y la directora general", Joan Ramon Villalonga y Juana María Garau, quienes le "ofrecieron los recursos" con los que contaban.

Añadía que la dirección general de Emergencias "no activó el Ibanat de manera oficial hasta las 9 de la mañana del día 10" y lo hizo ante "una nueva llamada del gerente". Para entonces, el Ibanat ya se había activado "fuera de protocolo, porque si no es un incendio forestal es responsabilidad de Emergencias activarlo", con el fin de que a las 7 de la mañana su personal estuviera en los centros de trabajo disponibles para lo que se les requiriera desde Emergencias.

En ese clima de tensión y de acusaciones cruzadas entre ambos departamentos, se enmarcan las instrucciones de Vidal para coordinar a los efectivos de Medio Ambiente sin esperar a Emergencias. Cabe tener en cuenta que la creación de la agencia autonómica única propuesta supondría el control por parte de Emergencias de los agentes del Ibanat.