El Gobierno ha declarado en su Consejo de Ministros de esta mañana zona afectada por una emergencia de protección civil, la denominada zona catastrófica, los municipios de Artà, Capdepera, Manacor, Sant Llorenç des Cardassar y Son Servera, afectados por las inundaciones. Este declaración permitirá a los damnificados acceder a las ayudas del Estado para paliar daños personales y materiales en viviendas e instalaciones.

En su visita a la zona afectada por las inundaciones la pasada semana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ya anunció que se declararía la zona como zona catastrófica.l presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ya anunció que se declararía la zona como zona catastrófica "El Gobierno no dará la espalda a las víctimas", aseguró el presidente del Gobierno, que quiso ver con sus propios ojos los tremendos daños que ocasionó el fenómeno meteorológico, pero sobre todo quiso mostrar su solidaridad con los vecinos afectados por la tormenta y, en especial, a los familiares de las víctimas mortales. "Mañana (por el pasado viernes) el Consejo de Ministros va a aprobar la declaración de Sant Llorenç como zona catastrófica, para que los vecinos afectados puedan recibir las ayudas económicas que necesitan", anunció Sánchez, si bien la declaración se ha demorado hasta hoy.

Sánchez aprovechó sus declaraciones a la prensa para enviar a los familiares de las víctimas su "respeto, cariño y empatía". Para aprobar la declaración de zona catastrófica, Sánchez explicó que "se elevarán dos informes, uno del Ministerio del Interior y otro del de Administraciones Públicas, para hacer efectiva esta declaración".

Las ayudas del Estado serán compatibles con las ayudas aprobadas hoy por el Govern. El Ejecutivo autonómico aprobó ayer el decreto ley marco que regulará sus diferentes líneas de ayuda para los afectados por la torrentada en la comarca del Llevant, que hoy aprobará oficialmente. En un Consell de Govern extraordinario, se dio luz verde a esta medida previa a la concreción hoy de las prestaciones sociales, indemnizaciones y subvenciones que abonará para los familiares de fallecidos, los propietarios de coches dañados, los dueños de viviendas anegadas, los empresarios y comerciantes, los agricultores y los vecinos con necesidades sociales urgentes a causa de la riada.

Si bien las cantidades se concretarán hoy, la portavoz del Govern, Pilar Costa, adelantó ayer las grandes cifras. Así, las ayudas irán desde los 6.000 euros de los coches siniestrados hasta 60.000 para las viviendas afectadas, además de 32.000 euros por defunción a las familias de los fallecidos.