La solución a los continuos atascos que se están sucediendo en las últimas semanas en las carreteras de Mallorca, especialmente en la Vía de Cintura y en los principales accesos a Palma, no pasa por nuevos proyectos de carreteras. Así, al menos, lo defiende Més y lo dejó negro sobre blanco en su documento sobre Medio Ambiente que aprobaron el pasado viernes, que marcará la política de los ecosoberanistas, que lideran el Consell con PSIB y Podemos, del que dependen las infraestructuras viarias de la isla. De hecho, el punto referente a los proyectos viarios en su documento estratégico es, a todas luces, un claro mensaje a sus socios socialistas en la institución.

En su documento, Més apuesta por una mejora del transporte público con un claro objetivo: "Permitirá la eliminación de los grandes proyectos viarios que quedan sobre la mesa y que Més no considera parte de la solución sino parte del problema", reza el documento de Medio Ambiente de los ecosoberanistas. Esta declaración de intenciones llega después de que ecosoberanistas, socialistas y podemitas acordaran en el Consell aparcar todos los proyectos viarios en lo que queda de legislatura. Una decisión que le valió las críticas de la oposición de PP y Pi, que se ofrecieron a la consellera socialista responsable de las carreteras, Mercedes Garrido, para aprobar sus proyectos.

Desde el pasado Més de abril y a falta de la llegada de cerca de 60.000 coches de 'rent a car' que el Govern ha descartado por el momento regular, se han sucedido en la Vía de Cintura de Palma y en los principales accesos a la capital colapsos circulatorios kilómetros y de larga duración que han puesto el foco en la movilidad en la isla, donde en la última década el tráfico ha aumentado un 43 por cientoel tráfico ha aumentado un 43 por ciento, mientras bajaba en el resto de España. Según los datos del Consell, en los últimos años, los coches que circulan por la Vía de Cintura han aumentado de 10.000 en 10.000 cada año. Los datos contrastan, según los informes para el diseño del plan de movilidad del Govern, con un transporte público que tarda un 40 por ciento más que el privado.

Para Més, según su documento aprobado, la solución no son nuevos proyectos viarios, sino que pasa por una mejor financiación que permita la mejora del transporte público, con una mejora en la red ferroviaria, con proyectos como el tren hasta Artà o el tranvía de Palma. La presidenta del Govern, Francina Armengol, ya descartó nuevas carreteras Armengol, ya descartó nuevas carreteras como solución a los problemas de movilidad que se están haciendo evidentes en la isla y el Govern, tal y como adelantó este diario, ya ha anunciado la ampliación del metro de la UIB hasta el Parc Bit, donde se ubican hasta 3.000 trabajadores, de los cuales el 80 por ciento acude al parque tecnológico en su vehículo privado.

Sin embargo, el pasado mes, PSIB y Més, no sin tensión, aprobaron, con los votos de la oposición y la abstención de Podemos el primer tramo del segundo cinturón o vía conectora que va desde la rotonda del Coll den Rebassa y el centro comercial Fan Mallorca hasta la rotonda de los depósitos de CLH que conecta con la carretera de Manacor. Los planes iniciales de la responsable de Territorio del Consell, Mercedes Garrido, a principios de legislatura eran, una vez redimensionado el proyecto del segundo cinturón, ampliar el tramo que va de Son Ferriol hasta Alcampo y llevarlo hasta el Polígono de Son Castelló y Camí dels Reis. Ahora este y otros proyectos han quedado aparcados y Més ya avisa en su documento: para los ecosoberanistas nuevos proyectos viarios no son la solución a los atascos.