La doctora M.R.P. fue agredida salvajemente el pasado miércoles por la noche en el centro de salud de Son Servera por una paciente que usó un teclado de un ordenador para golpearla repetidamente en cabeza, cuello, hombro y brazo derecho. "En las urgencias de los centros de salud esto es el día a día", explicó ayer mientras se recuperaba en su domicilio.

Se da además la circunstancia de que esta facultativa había sido agredida con anterioridad en este mismo PAC de Son Servera el pasado 14 de julio de 2012.

En esta ocasión, al parecer la paciente habría actuado ofuscada por tener que haber esperado un rato para ser atendida por una enfermera, demora que atribuyó a una actuación negligente por parte de la facultativa que le había atendido minutos antes, según el relato de los hechos facilitado por la propia doctora, que ayer por la tarde interpuso la correspondiente denuncia por el ataque sufrido.

"La paciente llegó al centro de salud con un motivo de consulta que no era urgente y así se lo hizo saber la administrativa, que le recomendó que pidiera cita a la mañana siguiente con su médico de cabecera. Pero ella le contestó que pusiera que tenía una lumbalgia para que le atendiera. Antes de que entrara en la consulta me avisaron de esa circunstancia, pero yo la atendí correctamente", comienza el relato la médico.

"La remití a cuidados de enfermería pero, por un fallo del sistema, no quedó registrada. Y estuvo esperando un rato hasta que se quejó y fue atendida por enfermería. Cuando preguntó por los motivos del retraso y se lo explicaron, regresó hecha una furia a mi consulta. Abrió la puerta y yo, que la vi alterada intenté disculparme, pero me dijo ' ¡ni perdona ni nada, gorda de mierda! Mi marido tiene que trabajar mañana y ha tenido que estar esperando ahí fuera'. Entonces, arrancó el teclado del ordenador y comenzó a golpearme. Estaba acorralada y afortunadamente entraron un señor que había venido con su hijo enfermo y creo que la propia pareja de la agresora y entre los dos consiguieron quitármela de encima", confiesa la facultativa.

M.R.P. asegura que estas situaciones son habituales en las urgencias de Primaria donde, revela, "en las salas de espera los pacientes interactúan y se crea un ambiente tóxico y muy agresivo, se alteran los unos a los otros".

Esta es la tónica habitual -llamadas a la puerta de la consulta, interrupciones- excepto cuando hay un guardia de seguridad, medida que en este PAC en cuestión solo se produce los viernes, denuncia la agredida, que lamenta el perjuicio que estos hechos provocan en la normal asistencia de pacientes que sí acuden por una urgencia y que quiere alabar para terminar la labor de los agentes de la Policía Local de Son Servera: "Son nuestra salvación. Cada vez que llamamos, vuelan".

Orden de alejamiento

El presidente del Sindicato Médico, Miguel Lázaro, reclamó ayer al Servei de Salut que a las personas que agredan a personal sanitario se les aplique una suerte de orden de alejamiento que impida que, al menos durante un periodo de tiempo, sean atendidos en el centro de salud u hospital donde han realizado el ataque y que sean derivados a otros centros.

Tanto la conselleria de Salud como el IB-Salut y la Gerencia de Atención Primaria de Mallorca condenaron enérgicamente cualquier agresión, verbal o física, a los profesionales del sistema sanitario público. El Servei de Salut activó el protocolo previsto para estos casos ofreciendo asistencia sanitaria y apoyo jurídico y psicológico a la profesional afectada.

Hay que recordar que desde la reforma del Código penal (marzo de 2015) el personal del sistema sanitario público es considerado "autoridad pública", y la norma prevé una pena de hasta cuatro años de prisión para el agresor.