La fiscalía y la acusación particular reclaman sendas penas de dos años de cárcel para una exdirectora y un jefe de mantenimiento del centro de internamiento de menores de es Pinaret por la muerte, en octubre de hace dos años, de un joven que prendió fuego a su colchón y falleció por el humo y las quemaduras.

Las acusaciones ven indicios de que la muerte del menor de edad en es Pinaret se produjo por una serie de negligencias y apuntan a una posible responsabilidad de la exdirectora del centro y del jefe de mantenimiento.

El titular del juzgado de instrucción 9 de Palma, Enrique Morell, dictó el pasado noviembre un auto en el que cerró la investigación y exculpó a dos antiguos gerentes del centro de menores dependiente del Govern.

La muerte del chico, O. R., de 17 años de edad, se produjo en octubre de 2015. El joven prendió fuego al colchón de su habitación. El incendio fue detectado cuando ya era tarde. El cuarto se había incendiado casi por completo y el muchacho falleció asfixiado antes de poder ser trasladado a un centro hospitalario. Tres trabajadores del centro también sufrieron intoxicaciones al intentar rescatar a la víctima.

Los motivos por los que el juez decidió continuar el sumario por un posible homicidio imprudente se basan en la no aplicación al joven de un protocolo antisuicidios y por el funcionamiento de las medidas contra incendio del centro de internamiento para menores que cometen delitos.

El detector de humos no funcionó correctamente y, según certificó la Guardia Civil, llevaba roto algo más de un año. Los agentes que investigaron el caso también detectaron la posible falsificación de la firma de un ingeniero en un documento relativo a la seguridad del centro. El fallo en el sistema de detección retrasó, según el auto, la reacción de los monitores del centro que, además se encontraron con dificultades a la hora de abrir la puerta de la habitación en la que estaba la víctima.

El juez dio traslado a Fiscalía para que presentara su escrito de calificación provisional y acusara a los dos imputados. En el mismo escrito se descartaron responsabilidades en la actuación de los gerentes del centro: el que estaba en ese momento al cargo y su antecesor.

El Govern acordó el pasado 17 de noviembre pagar una indemnización de 224.600 euros a la familia del menor de 17 años O. R., que falleció en el centro de menores de Es Pinaret en octubre de 2015 después de que él mismo prendiera fuego al colchón de su habitación. Esta cantidad se abonará como responsabilidad patrimonial de la administración autonómica. El Govern figura como responsable civil en la causa.