-Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Necesita un sueldo de conseller?"

-Cobraría lo mismo que como diputado, pero Podemos necesita consellers, ha de activar a sus votantes de élite y estoy convencido de que formaremos parte del Govern. Entraremos a finales de octubre, tras la consulta interna.

-¿Usted será conseller?

-Paso a paso. Hay que marcar un camino, los nombres no son tan importantes.

-Armengol se niega a acogerles en su Govern.

-Se demuestra que puede suponerle dificultades gobernar con nosotros, que somos el primer partido progresista en dos elecciones generales consecutivas.

-¿Qué le dice Armengol en la intimidad?

-No hablamos a diario, sino cada dos semanas, cuando hay algo relevante. No he querido ser la avispa que le aguijonea constantemente y ella guarda cierta distancia.

-Siempre me toca entrevistar a perdedores.

-No percibo el fracaso, sino la necesidad del relevo y de entregar el testigo.

-A la fuerza.

-Tuve dudas el año pasado, y ahora quiero que se reconozca el trabajo inmenso y logros luminosos como el mitin del Palma Arena. Podemos es un partido de náufragos, cada uno de nosotros proviene de experiencias heterogéneas y he ejercido de psicólogo durante 24 horas al día.

-¿Qué tiene Laura Camargo que no tenga usted?

-Que es mujer, y su trayectoria política le hace concebir el partido y la política de forma clásica. Yo apostaría por romper más moldes. Ha sido dificultoso, pero hemos dirigido el partido conjuntamente. Todavía no hay candidatos, pero solo quiero que la próxima secretaria general preserve la cohesión que he mantenido durante tres años.

-¿El poder se sube a la cabeza?

-Lo he visto muy de cerca. El nuevo ecosistema, la silla, el poder, aunque por mi carácter me he visto alejado de esa sensación de ostentación. He sido más observador que protagonista, con mirada periodística.

-¿Qué vicio contagioso ha observado?

-He visto a diputados a quienes les costaba servirse ellos mismos el agua en el Parlament, levantarse en lugar de pedirla. Algunos ya no son capaces de dar marcha atrás.

-No han ganado nada expulsando a Xelo Huertas.

-Podemos ganó en dignidad. El comportamiento in crescendo de estas dos diputadas avergonzaba a la militancia. Iban absolutamente por libre, y Huertas asumía relaciones con el Govern para las que no estaba legitimada.

-Usted exigió la presidencia para Huertas.

-No voté a Xelo de presidenta del Parlament en los órganos del partido. Y en la negociación del Pacto quería al senador, igual que Pablo Iglesias. Me quedé en minoría.

-El president Balti se fija pero no aprende.

-Eso escribe usted. Balti está aprendiendo, un proceso que hay que reconocerle desde que es diputado. La presidencia requiere más tiempo porque todas las relaciones son más sutiles, pero Balti representa la imagen de Podemos mejor que Xelo Huertas.

-Usted conoce el alquiler turístico ilegal de primera mano.

-Tuve unos ingresos y se 'olvidó', entre comillas, declararlos.

-Admitirá que ese olvido es culpable.

-Debió declararse, pero no supuso un solo euro público en cuanto atendí al requerimiento de Hacienda. Ocurrió antes de entrar en Podemos y en una zona sin emergencia habitacional como Son Serra de Marina. Todo lo de Podemos es un drama, pero hay que diferenciar la lucha por la supervivencia del alquiler como negocio.

-Confieso que voy al Palacio de Congresos, pero usted lo ha construido.

-Cuando llegué, el dinosaurio ya estaba allí. Había pocas posibilidades de demolerlo, es una de esas infraestructruras que te comen. Debimos reivindicar que fuera público, y que se constatara la infamia que supone su existencia. Por ejemplo, obligando a la explotadora a colocar un cartel con el dinero público perdido en el Palacio.

-Gobernar no iba de prohibir los toros.

-Estamos obligados a pactar, por lo que el cambio que ofrecimos a la ciudadanía no es tan intenso como nos gustaría. Hemos tenido que rebajar exigencias, pero ahí está un impuesto turístico antes inimaginable.

-Una ecotasa que no lograrán aumentar.

-La ecotasa se subirá este año, no tengo dudas de ello.

-Los votantes de Podemos son muy superiores a sus cargos electos.

-Me he encontrado con personas que me decían que nos votaron y eran hoteleros, jueces, altos funcionarios, médicos o pilotos. Esperaban una experiencia a la altura, porque la sociedad va muy por delante de sus gobernantes y es tan exigente con las ideas políticas como con la gastronomía. Has de encontrar las dosis exactas de los ingredientes.