El Servicio Integral de Vigilancia de Exteriores (SIVE), un radar ubicado en el litoral de ses Salines dependiente de la Guardia Civil, sigue demostrando una eficacia muy relativa a la hora de detectar pateras. Este año solo ha identificado las dos embarcaciones descubiertas cerca de Cabrera en Semana Santa. En cada una de ellas viajaban catorce inmigrantes, 28 en total. Es decir, menos del cincuenta por ciento de los 75 que han sido interceptados desde enero.

Fuentes de la Guardia Civil que prefirieron mantener el anonimato indicaron que el SIVE está fallando porque no lo maneja personal con suficientes conocimientos para sacarle el máximo rendimiento.

Este diario ha solicitado en reiteradas ocasiones hablar con algún responsable del radar para que explicara su funcionamiento, pero la Benemérita ha declinado aparecer en este reportaje.

El SIVE, que empezó a funcionar a pleno rendimiento a mediados de 2010, será reemplazado a la larga por el Seahorse Mediterráneo, un satélite financiado con fondos europeos y que funcionará a pleno rendimiento a partir de 2018.

Presumiblemente esta infraestructura, que ya opera en el Atlántico, será prácticamente infalible a la hora de detectar pateras y embarcaciones de narcotraficantes en aguas del Mediterráneo.

La mayoría de los inmigrantes que han desembarcado de manera irregular en Mallorca este año han sido localizados por payeses o personas que paseaban por la zona, que han avisado a la Policía Nacional o a la Guardia Civil.