Las listas de esperasiguen siendo el principal problema de la sanidad pública balear ya que casi 13.500 personas (13.478) aguardaban una media de 110,9 días ser intervenidos quirúrgicamente y otras 60.749 pacientes hacían lo propio para ser visitados por el especialista una media de 88,8 días a finales del pasado año, según informó ayer el Servei de Salut.

En la rueda de prensa pública para facilitar los datos correspondientes al último trimestre del ejercicio anterior, el director general del Servei de Salut, Juli Fuster, que compareció acompañado del director asistencial, Nacho García, admitió que no eran unas cifras para "tirar cohetes" aunque matizó que se percibía "una ligera tendencia de mejora en los datos", pese a apuntar que en el último trimestre del año se celebran unas fiestas navideñas en las que, recordó, mengua la actividad asistencial.

Así, tras revelar que el número de pacientes que esperaban ser operados a finales del año pasado se había reducido en 1009 personas -14.487 aguardaban a finales de 2014 frente a los citados 13.478 que lo hacían doce meses después-, recalcó que lo importante no era el volumen de pacientes sino el tiempo que esperaban para ser atendidos. Dicho esto, esgrimió que la demora media para ser intervenido se había recortado en 3,4 días frente a los 114,3 que había que esperar a finales de 2014, recorte que implica una rebaja porcentual del 2,9%.

También resaltó que se había producido una rebaja de 309 personas en el número de pacientes que esperaban más de seis meses para una intervención quirúrgica (un 11,2%).

En la misma línea, el director general del IB-Salut recalcó que en el 96,9% de los casos (13.065) en que los pacientes esperaban para una operación se trataba de una patología de prioridad normal o baja. Mientras que en el 3% restante (413) aguardaban por una patología de prioridad preferente.

En los casos de las intervenciones oncológicas de prioridad 1 -carcinoma de próstata, carcinoma de vejiga, cáncer gástrico, cáncer de colon, etcétera- la detección, el diagnóstico y el tratamiento se completan en una media de 28,70 días "desde la primera consulta hasta el quirófano con todas las pruebas diagnósticas realizadas", puso en valor Fuster, que rompió una lanza en favor de los profesionales que posibilitan esta atención tan rápida en los procesos verdaderamente graves.

Oftalmología y trauma

Preguntado sobre cuáles son las especialidades que soportan una mayor lista de espera quirúrgica, el máximo responsable del Servei de Salut habló de oftalmología, y señaló básicamente a los pacientes que esperan una operación de cataratas, y de traumatología, donde situó los mayores tiempos de espera en los procesos asistenciales de prótesis de cadera y de rodilla.

Con respecto a las personas que esperaban consulta con el especialista médico en alguno de los hospitales de agudos de esta comunidad, Fuster admitió que había 2.143 pacientes más haciéndolo, pero contrapuso este mal dato a que mientras la demora media en diciembre de 2014 era de 102,6 días, el mismo mes del año pasado la espera general era de 88,8 días, las citadas 13,8 jornadas menos.

Del número total de consultas, 13.677 (22,5%) correspondían a la especialidad de oftalmología, 11.868 (19,5%) a la de traumatología y cirugía ortopédica, 5.900 (9,7%) a la del aparato digestivo, 4.583 (7,5%) a la de dermatología y 4.965 (8,1%) a la de otorrinolaringología, facilitó el Servei de Salut.

Los diez procesos quirúrgicos más frecuentes son los siguientes: facoemulsificación y aspiración de catarata (2.253), extirpación de lesión de piel (1.934), hernias (834), colecistectomía (695), ligadura y extirpación de venas varicosas de las extremidades inferiores (647), otras extracciones quirúrgicas de dientes (464), prótesis de rodilla (445), circuncisión (372), liberación de túnel carpiano (362) y artroscopia de rodilla (345).

Y por hospitales, Son Espases era, con 4.529 personas pendientes de pasar por quirófano, el primero de la lista en este aspecto seguido de Son Llàtzer, con 3.371 enfermos aguardando la intervención, mientras que en tercer lugar, a gran distancia, se encontraba el comarcal de Manacor con un total de 1.461 pacientes esperando ser operados.

Pruebas radiológicas

Respecto a las pruebas radiológicas, a 31 de diciembre de 2015 había 43.829 personas en la lista de espera, una cifra que se ha reducido un 5,04% respecto al año anterior en el que había 46.155 personas aguardando. En 2015, los pacientes han esperado una media de 41,40 días, muy por debajo de los 98,08 días del año anterior, resaltaron desde el IB-Salut.

Por hospitales, llama la atención que sea Son Llàtzer el centro sanitario público con un mayor número de pacientes esperando una prueba radiológica, un total de 16.250 personas sobre un total de 43.829. También el Mateu Orfila de Menorca, con 6.427 personas aguardando estas pruebas diagnósticas, superaban el listado de pacientes que esperaban en Son Espases, que a finales de diciembre del año estaba formado por 6.236 personas.

Fuster destacó asimismo la rebaja en los tiempos de espera en diversas pruebas diagnósticas. Así, a finales del pasado mes de diciembre una mamografía se demoraba una media de 31,04 días frente a los 75,2 del año anterior; para una resonancia había que esperar 55,4 días (69,3 en 2014) y para un tac 42,09 días, menos de la mitad de lo que había que esperar hace un año (86,23 días). Concluyó señalando que para un ecocardiograma había que esperar una media de 155,9 días, 124 para una gastroscopia y 162,9 días para una colonoscopia.