La foto del mercado laboral balear de junio refleja que las islas juegan con una clara ventaja respecto al resto del país en la recuperación del empleo, independientemente de la calidad que éste pueda tener, dado que su reactivación no solo empezó antes, sino que además lo está haciendo con una fuerza a la que muy pocas autonomías se acercan. El archipiélago cerró el mes pasado con 55.508 desempleados, lo que supone un descenso del 11,3% respecto al mismo periodo de 2014. Pero aún más llamativo es el dato de afiliados a la Seguridad Social: las personas con trabajo han aumentado hasta alcanzar las 491.358 (prácticamente un 5% más que las que había 12 meses atrás), la tercera cifra más alta de la historia del archipiélago en esta época del año, solo superada por las de 2007 y 2008, ejercicios en los que se superaron los 500.000 afiliados y se alcanzaron las cotas máximas del empleo balear.
Este incremento interanual de las personas ocupadas es además el más potente del país. Al 4,99% balear solo se acercan Murcia (4,66%), la Comunidad Valenciana (4,43%) y Canarias (4,33%), y queda muy por encima del 3,42% de la media española. Si estos 491.358 afiliados de junio se comparan con los del mes anterior, la subida es del 5,1%, sin parangón en ninguna otra zona del país, donde el ascenso medio mensual ha sido del 0,2%.
Otro aspecto a destacar es que todos los sectores de la economía isleña, con la única excepción de la agricultura, empujan hacia arriba. Así, el empleo en la construcción presenta un incremento del 13,4% respecto al mismo mes de 2014, mientras que en la industria lo hace con una tasa del 4,4%.
El sector más importante de la economía balear, como son los servicios, aumenta su cifra de afiliados un 4,6%, y dentro de éste la hostelería lo hace a un ritmo del 5,5%, mientras que el comercio alcanza un 4,1%. Como se ha indicado, el único dato negativo es el del sector primario, con un descenso del 1,4%.
Evolución del desempleo
Los 55.508 desempleados registrados en junio en el archipiélago implican que en un año se ha dado un recorte del paro del 11,3% respecto al año anterior, la tercera tasa más alta del país, solo superada por el 12% de Cantabria y por el 11,7% de Castilla y León, y en cualquier caso muy por encima del 7,4% de la media española.
Si la comparación se hace en relación a mayo, la bajada se cifra en un 5,6%, en este caso el porcentaje más importante del país, cuya media ha sido del 2,2%.
El descenso interanual del desempleo de las islas es generalizado y aparece en la totalidad de los sectores. En el caso de la construcción, el recorte interanual del paro llega a un 18,1%, mientras que en industria esta bajada se cifra en un 13,9%. La reducción del desempleo en la agricultura es de un 7%.
En cuanto al sector servicios, la bajada del paro respecto a 2014 es igualmente significativa: un 10,3%. Dentro de este grupo, se puede destacar el recorte de un 12,9% en el comercio y de un 9,3% en la hostelería.
Otro punto destacable es que el paro de larga duración se reduce por encima de la media balear, y los que llevan más de 12 meses sin un puesto de trabajo descienden un 14,5%, aunque su cifra sigue siendo muy elevada, al encontrarse en esta situación 22.438 residentes en las islas.
Por edades, los menores de 25 años han visto reducir su desempleo de forma más débil, con un recorte interanual del 8,8%, mientras que en los de más de 25 años la bajada ha sido del 11,6%. Por sexos, en paro entre las mujeres se ha recortado un 8,8% mientras que el de los hombres lo ha hecho un 15,3%.
Por islas, la mejor evolución aparece en las Pitiüses, con una reducción del 14,6% en la cifra de personas desocupadas de Eivissa y del 12,2% en las de Formentera. En Menorca esta caída ha sido del 12,3%, y la más débil aparece en Mallorca, con un 10,8%.
En relación al tipo de contratos suscritos durante el pasado mes de junio, solo un 8,4% tuvieron carácter indefinido en Balears, aunque se trata de la cuarta tasa más elevada del país, seguida del 14,6% de Madrid, del 10,5% de Canarias y del 10,2% de Cataluña. Además, queda por encima de la media estatal, en la que solo un 7,3% de las contrataciones han sido de carácter indefinido.
