Entre los argumentos que Bauzá da en su escrito de conclusiones en defensa de la compatibilidad entre el ejercicio de su cargo y sus negocios privados, resalta que su farmacia de Marratxí "no ha firmado ningún contrato, concierto o convenio con la Administración Pública", ni tramitado "factura alguna" desde 2011 "con la conselleria de Salud ni con el Servicio de Salud balear". Lo que no explica en su escrito es que no son las farmacias las que firman los convenios con el Govern para los productos de la Seguridad Social, sino el Colegio de Farmacéuticos, que después se encarga de repartir a las boticas lo correspondiente por las ventas de los fármacos financiados por el sistema público. De hecho, Bauzá facturó el pasado año al Govern a través de su botica 489.405 euros solo en concepto de recetas para pensionistas, según informó en el Parlament el conseller Martí Sansaloni, quien se negó a desvelar cuánto ingresó Bauzá por el resto de medicamentos financiados por el IB-Salut.