Las pesquisas realizadas en las últimas semanas dentro del caso Can Domenge, y especialmente en la pieza que se mantuvo secreta varios meses en el Tribunal Superior de Justicia de Balears, han propiciado vastos rastreos informáticos en los ordenadores del Consell, así como pruebas periciales caligráficas.

Las búsquedas informáticas han permitido localizar el rastro de documentos y mensajes que podrían ser pruebas muy importantes contra la supuesta trama. Los informes caligráficos efectuados por la Policía van en ese mismo sentido.