La plantilla de Metalships estalla tras otros siete despidos y va a la huelga por su “desmantelamiento”

El Sea Cloud Spirit es conocido como el último gran barco creado por MetalShips & Docks. Ahí llegó en 2018, años después de que el astillero Factoría de Naval de Marín (Pntevedra) quebrase por el parón del sector y la parálisis del tax lease, concretamente en 2010, y en Vigo se quedó hasta 2021, cuando se produjo su entrega a Sea Cloud Cruises. Se trata de un velero tipo goleta de tres mástiles, uno de los más grandes del mundo destinado al turismo premium. Cuenta con cinco cubiertas y 4.200 metros cuadrados de velamen izado, capacidad para 136 pasajeros y 90 tripulantes, y su contrato proporcionó a la empresa de Teis alrededor de 750.000 horas de trabajo. Ese tiempo, aunque equivalente a la creación de 350 puestos, nada tiene que ver con la plantilla de la compañía, que en 2020 hizo consejero delegado a Jesús Villacañas y ahora mismo únicamente posee unos 40 empleados. “Hace tres años éramos más de 70”, lamenta José Antonio Fernández Vila, presidente del comité en funciones. Él fue una de las 30 personas despedidas a lo largo de este trienio, siete de las cuales vieron cómo perdían su puesto el pasado viernes.

Ayer, tres días después de esa comunicación, el personal se concentró a las puertas de la planta olívica y el responsable sindical avanzó la convocatoria de una huelga indefinida contra lo que consideran su “desmantelamiento”. “Vamos a convocar huelga indefinida y vamos a hablar con los CIG y UGT porque entendemos que tenemos que dar de una vez por todas una respuesta”, indicó en una rueda de prensa desde la fábrica, que no pudo abrir a primera hora de la mañana por la acción liderada por CC OO.

"Política de cero contrataciones"

Fernández Vila, que incluso tildó de “sicario” al actual CEO de MetalShips & Docks, resaltó posteriormente en declaraciones a Faro de Vigo, de Prensa Ibérica, que desde su llegada el astillero no ha construido ninguna nueva embarcación como el Sea Cloud Spirit. “Se ha aplicado una política de cero contrataciones”, señaló, apuntando que “solo se han realizado reparaciones de naves que no han dado más de sí”. A sus ojos, además, la carga laboral ha decrecido voluntariamente: “Desde el primer día que llegó nos dejó claro que el objetivo era quedarse exclusivamente con una docena de empleados”.

El presidente del comité en funciones no descarta que la dirección esté desprendiéndose de la mayor parte del personal para facilitar su futura venta, y critica que haya desaprovechado la oportunidad de vender la empresa a Astilleros Gondán. La compañía, que cerró el último ejercicio con 2,2 millones de pérdidas a mayores de los 4,5 millones del año anterior, habría pedido 30 millones por las instalaciones, asegura. Una “pasada de frenada” que compara con los 14,5 millones por los que se vendió Barreras.

La hoja de ruta

“En este momento no hay ningún comprador. Y si tienes una empresa y no la vendes ni quieres invertir en ella pues la situación es la que es”, aseveró asimismo Fernández Vila, subrayando que “se hará todo lo posible para acabar con esta situación”. Está previsto, según destacó a este periódico, que esta semana se establezca la hoja de ruta que contemplará todas las actuaciones de movilización que se van a llevar a cabo, intentando que participen distintos agentes del sector.

El presidente del comité en funciones se mostró crítico también con Manuel Rodríguez, presidente del Círculo de Empresarios de Galicia y dueño de Rodman, grupo al que pertenece MetalShips & Docks y que ha preferido no hacer declaraciones. “Cuando el empresario no quiere apostar por el astillero, esto dura lo que dura”, dijo, y pidió la intervención a las administraciones. En su caso y en dos de las siete últimas personas despedidas, advirtió, se trataba de responsables sindicales: “No se puede estar despidiendo así. Ha sido pura represión”.

La situación de Metalships

1. Ningún barco desde 2020

Según denuncia el comité de empresa, la compañía no ha conseguido ningún contrato para construir barcos desde que llegó su nuevo CEO.

2. 2,2 millones en pérdidas

En paralelo, la empresa no ha hecho más que registrar pérdidas. A los 4,5 millones de 2021 se suman otros 2,2 que se esfumaron el pasado año.

3. Acciones de movilización

Ante la oleada de despidos y la represión sindical, la plantilla está preparando una serie de acciones para movilizarse los próximos días.

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