Pep Sansó ya es el presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears

Pep Sansó es el nuevo presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears, tal y como se ha publicado este sábado en el BOIB, tras ser validada su candidatura por parte de la Direcció General d’Esports del Govern. El pasado 2 de julio, el hasta ahora presidente de la FFIB, Miquel Bestard, anunciaba en la Asamblea General Ordinaria su intención de dimitir de sus cargos e iniciar un proceso de renuncia tras 19 años en el cargo. Su dimisión, según marcan los estatutos de la FFIB, permitía que su vacante pudiera ser ocupada por uno de sus vicepresidentes y será Pep Sansó quien ostente la presidencia.

Pep Sansó era hasta ahora director de la Escuela de Entrenadores y director deportivo de la FFIB, director de formación y director de la Escuela Nacional de entrenadores de la RFEF y miembro del Panel Jira de UEFA. Desde este momento renuncia a todos sus cargos ejecutivos para dedicarse al 100% a su nueva etapa de presidente de la FFIB, pasando a ostentar únicamente cargos representativos en la RFEF y en la UEFA.

Pep Sansó atesora una gran experiencia en el mundo del fútbol balear. Como entrenador ha dirigido al San Francisco, La Salle, Campos, Real Mallorca y Atlético Baleares en Segunda B, Tercera División y todas las categorías del fútbol de formación. Destacan especialmente sus 17 temporadas en la categoría Juvenil División de Honor, acumulando casi 700 partidos como entrenador en categoría nacional.

Además, en el RCD Mallorca ejerció las funciones de Director del Fútbol Formativo y ha realizado funciones de asesor en diferentes equipos profesionales de LaLiga. Pep Sansó se incorporó a la FFIB en 1996 con la llegada de Miquel Bestard a la presidencia del Comité de Entrenadores, pasando a ser director de la Escuela de Entrenadores de la FFIB. Durante los cinco mandatos de Miquel Bestard, Pep Sansó ha sido una figura clave en el día a día de la federación y su experiencia en la gestión de diferentes proyectos en la FFIB, RFEF y UEFA le ha permitido atesorar la experiencia necesaria para afrontar el reto de la presidencia de la FFIB.