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Minuto 91 | Xisco Muñoz se abre paso en la Premier a lo grande

El entrenador mallorquín asciende al Watford a la élite del fútbol inglés y se une al selecto grupo de técnicos isleños que han subido a Primera División

Nadal se tiró sobre la tierra del Real Club de Tenis Barcelona tras su victoria sobre Tsitsipas.

Con una amplísima experiencia como jugador -Recreativo, Valencia, Betis, Levante, Nàstic y Dinamo de Tblisi-, Xisco Muñoz Llompart ha alcanzado a sus 40 años una pequeña dosis de gloria como entrenador ascendiendo al modesto Watford inglés a la Premier. El mallorquín se une así al selecto grupo de entrenadores isleños que han ascendido a Primera División, junto a Serra Ferrer y Pep Bonet y Tomeu Llompart. Tras retirarse en el Nàstic, se puso de segundo de Vicente Moreno en el conjunto de Tarragona. Regresó al Dinamo de Tblisi como entrenador y triunfó. Y hace cuatro meses se puso al frente del Watford con el resultado ya conocido. Futbolista que no fue profeta en su tierra, se pone en el aparador de los banquillos. Es solo el principio, pero el futuro es suyo.

Otra oportunidad para el Mallorca. El equipo de Luis García afronta esta noche en Sabadell otra ocasión inmejorable para dejar prácticamente visto para sentencia el ascenso a Primera. Con el Almería fallando jornada sí, jornada también, el Mallorca visita al peor local de la categoría. Es hora de dar un golpe sobre la mesa. En cualquier caso, pase lo que pase en la Nova Creu Alta, los rojillos tendrán suficiente ganando los tres partidos que le quedan en casa para certificar su ascenso a la máxima categoría.

A vueltas con la Superliga. Ha bajado el suflé de lo que sin duda ha sido el tema de la semana pasada, la caída de la Superliga como un castillo de naipes en apenas 48 horas. Todo le ha salido mal a Florentino Pérez, desde su puesta en escena para confirmar la puesta de largo de su fracasada idea -nada menos que en el Chiringuito- hasta los argumentos. Hay que tener mucho morro para decir que esta competición, cerrada y solo al servicio de los más ricos, se crea para evitar la ruina de los clubes. El primer paso para que esto no ocurra es no invertir millones y millones de euros en jugadores que no lo valen, y el Barça de Bartomeu sabe mucho de esto. Para rematar el tema, me quedo con dos frases, las dos muy reales, de Pep Guardiola y Diego Simeone. El catalán rechaza la competición porque «el deporte no tiene sentido cuando se rompe la relación entre el esfuerzo y el éxito»; el argentino cree que «habrá un antes y un después» de lo que ha sucedido. La Champions necesita cambios, una vuelta de tuerca. Habrá que ver si para bien.

Inconmensurable Nadal. Más que justificado fue el gesto triunfal de Nadal de lanzarse sobre la tierra del Real Club de Tenis Barcelona. Tras casi cuatro horas de partido batió al griego Tsitsipas en la final del Conde de Godó, un duelo que fue una montaña rusa, con pelotas de partido para uno y otro. El mallorquín conquista su duodécimo título en la capital catalana -otra cifra de escándalo en su excelso palmarés- en la que seguramente ha sido su final más difícil ante el jugador en mejor forma sobre tierra, con título en Montecarlo incluido. Falta un mes para Roland Garros, y con Djokovic dando tumbos -eliminado en octavos en Montecarlo y en semifinales en su torneo, Belgrado-, las amenazas para Nadal en París se llaman Tsitsipas y Rublev, dos jóvenes veinteañeros dispuestos a romper de una vez la hegemonía del mejor tenista en la tierra.

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