Una semana movida

El Mallorca ha vivido una semana convulsa. Si la entidad rojilla ya se había visto afectada por la polémica del grupo Drac, los seis fichajes que ya ha cerrado -una cifra nada despreciable para ser primeros de julio- han vuelto a ser motivo de comentario. Alhassane Keita, que llegó ayer, ya fue anunciado hace dos semanas. Con la llegada de julio, los directivos del club se apresuraron por concretar movimientos en la plantilla bermellona: el martes llegó Óscar Díaz, el jueves fue el turno de Mario Suárez y finalmente el canario Ayoze Díaz y el ex del Liverpool Josemi González aterrizaron el viernes en Mallorca. El único jugador que falta por llegar a la isla es José Manuel Jurado, que a día de hoy, recién casado, disfruta de su luna de miel.

Todo apuntaba a que los problemas económicos de Vicenç Grande, presidente de la entidad, causarían una desbandada de futbolistas en el Mallorca por miedo a la insolvencia. Pero a pesar de las bajas, el Mallorca ha conseguido reforzarse para la próxima temporada. La mayoría de los incorporados son jóvenes -con una media de edad de 24 años- que aún tienen que hacerse un nombre en la elite del fútbol.

La nueva plantilla

En el capítulo de altas, el internacional guineano Keita ha sido la primera incorporación de una larga lista de novedades. El delantero africano proviene de la liga árabe y se compromete con el Mallorca por cinco temporadas. Óscar Díaz, el segundo fichaje, ha venido del Elche para reforzar el ataque bermellón. Este canterano del Real Madrid aún ha de debutar, a sus 24 años, en la máxima categoría del fútbol español. Como él mismo declaró, "tengo que demostrar que puedo jugar en Primera". Una frase que podría extrapolarse a otros de los recién llegados.

Dos son los fichajes que vienen del Atlético de Madrid. José Manuel Jurado, aunque formado en la cantera de la Casa Blanca, suplirá la ausencia de Ibagaza en el medio del campo. El gaditano viene acompañado de Mario Suárez, que en la pasada temporada jugó cedido en las filas del Celta. Suárez ocupa una posición clave del centro del campo. El ex colchonero es un organizador del juego, cuya función será sustituir a Basinas.

Ibagaza ha sido la baja más lamentada por los mallorquinistas. El Villarreal, nuevo club del Caño, insistió hasta la saciedad para hacerse con sus servicios. Tal fue la persistencia que el Villarreal ofreció medio millón más respecto a la cláusula del argentino -hasta alcanzar los 2 millones de euros- y al lateral Josemi, que no contaba con la confianza de Pellegrini. El último en firmar ha sido el canario Ayoze, titular indiscutible en el Euro-Racing y que reemplazará a Fernando Navarro en la banda izquierda.

Con todo, Grande quiere disipar cualquier duda sobre las posibilidades económicas de la entidad de Son Moix. Y aunque el entrenador Gregorio Manzano ha manifestado durante la semana su preocupación por las remodelaciones de la plantilla, Grande ya ha anunciado su intención de que se incorporen cuatro o cinco jugadores más. El técnico jienense reconoció que se siente "molesto" porque le hubiera gustado "que no se fuera nadie", aunque no tendrá más remedio que disputar la próxima liga con los jugadores que le traigan. Él mismo reconoce que "habrá que comenzar de cero o casi de cero" y aún se lamenta por haberse quedado a las puertas de jugar competición europea.

Lo seguro es que faltan siete días para comenzar de lleno la pretemporada en la ciudad austríaca de Kössen y Manzano querría tener lista para entonces la plantilla definitiva del curso que viene. De momento, el portero Toni Doblas y el centrocampista Pep Lluís Martí son pretendidos por el Mallorca y podrían venir a la isla en breve.