"No tiene importancia alguna. Se trata de una pequeña distensión, además en el tobillo bueno, el derecho, que en absoluto le va a impedir jugar esta semana", señaló a EFE uno de los doctores que atiende al jugador español.

Nadal, pues, viajó a Londres sin novedad para debutar el miércoles en el Queen´s, sobre hierba y antesala del torneo de Grand Slam en Wimbledon.

El jugador mallorquín parte como primer favorito en Queens y está exento en primera ronda. Se enfrentará con el ganador del encuentro entre el argentino Juan Martín del Potro, su primer escollo este año en París, y el sueco Thomas Johansson.

La citada resonancia magnética estaba programada hace dos meses y, por tanto, se trataba de una prueba rutinaria, dijeron a EFE fuentes próximas al tenista español.