El presidente de la Federació de Penyes Mallorquinistes, Matías Rebassa, destacó ayer a DIARIO de MALLORCA "la importancia" del encuentro que esta tarde disputa el conjunto rojillo, en Son Moix (17.00 horas), ante el Sevilla de Juande Ramos.

El mal trago de la pasada temporada, en la que el once bermellón estuvo en posiciones de descenso en 32 de las 38 jornadas de la competición y se salvó en el último suspiro, marca el inicio del presente curso. El cuadro isleño abandonó el pasado miércoles, después de vencer al Celta en Palma (1-0), la plaza de colista que había ocupado durante tres fechas del calendario.

"Creo que es un buen momento para hacer un llamamiento a la afición", opina Rebassa ante la creencia de que se trata de un "compromiso que puede permitir al Real Mallorca salir de la zona baja de la clasificación y escalar algún lugar en la tabla".

El objetivo de esta invitación es claro: "Hay que evitar estar como el año pasado". Los mallorquinistas han sumado dos victorias en nueve compromisos ligueros, ambas como once local.

"No quiero hablar de cifras ni de qué número estaría bien que viniera al estadio, pero me gustaría que se llenara el máximo posible para recibir al Sevilla", comenta el máximo representante del colectivo de peñas.

Los antecedentes no ayudan a tener excesiva confianza en que esta tarde se registre una gran entrada, si bien el Sevilla es uno de los equipos con mejor acogida en la isla después del Real Madrid, Barcelona y Betis.

El récord de la presente campaña se alcanzó ante el Deportivo, en el estreno liguero, con 17.724 asientos ocupados en el multiusos. Paulatinamente las cifras han disminuido hasta los diez mil espectadores contra la Real Sociedad.

Buena entrada del miércoles

Rebassa mantiene que "a la vista de que era un partido entre semana, a las ocho de la noche, está muy bien que vinieran el pasado miércoles once mil personas ante el Celta".