"El Real Madrid nos ganó a balón parado. Uno nunca espera que un equipo como este nos apabulle así, sino con otro estilo de juego. Nos mató el Madrid con un arma que deberíamos haber tenido nosotros", aseguró Héctor Cúper a la conclusión del encuentro de anoche en el Santiago Bernabéu. Noventa minutos que sirvieron para situar por primera vez esta temporada al Mallorca como último en la clasificación de la Liga.

"Los goles duelen porque llevamos muchos (14) y tenemos que resolverlos de una vez por todas. Cuando el equipo no está mal siempre aparecer una acción que nos hunde psicológicamente", justificó sin quitarse culpa de los ocurrido: "El partidos de hoy lo hemos perdido nosotro en jugada de estrategia. Allí ha estado el gran error o el gran acierto de ellos. Tienen a Beckham que la pone muy bien y a Roberto Carlos que tampoco ha fallado. Han sido todo grandes goles y cuando nosotros hemos estado cerca de hacer lo propio no lo hemos aprovechado".

Las consecuencias a la derrota son conclusiones pesimistas y más tras la abultada derrota del conjunto blanco que en los últimos cinco años sólo había vencido en una ocasión a los bermellones en el Santiago Bernabéu en campeonato liguero. "La valoración es simple: es muy mala. No podemos hablar de cosas que hacemos bien porque nadie nos escucharía. El arranque es muy malo y creo que rápidamente el equipo tiene que salir y comenzar a ganar partidos porque la palabra crisis no me gusta", anotó. Pese a ello, no está descontento del todo con la forma que tienen sus jugadores de afrontar los encuentros. "Es un mal arranque en cuanto a resultados, pero en cuanto a juego no es tan malo. El problema es que soy de los que piensan que el resultado es lo que manda", aclaró.

Arango y Ballesteros

Dos fueron los futbolistas que fueron el blanco de las preguntas de la prensa en la sala de prensa del estadio. El venezolano Arango porque era el jugador en el que estaban puestas las miradas, el hombre que más temía la parroquia blanca. Al final, la colocación retrasa en el centro del campo del sudamericano levantó el debate: "Arango no tiene una posición fija, hoy -por ayer- ha jugado como un pivote más defensivo, pero puede jugar en varios puestos, no es su posición definitiva".

La cara negativa de la jornada fue la expulsión de Ballesteros. Es la segunda de la temporada y de nuevo, como en el Camp Nou, volvió a mostrar su enfadó dándole un tortazo a un rival. En la jornada dos fue Puyol, ayer le tocó el turno a Bechkam. Cúper se disculpó por no conocer realmente lo que sucedió en esa acción: "No vi lo que pasó con Ballesteros. Sé que en un momento dado se arma un revuelo, pero no sé qué ha sucedido. Cuando digo que quiero el reflejo del entrenador en el equipo hablo de actitud de conjunto porque no puedo controlar a cada uno. Recibir los goles que recibimos me duele mucho", sentenció en la capital.