(Re)lecturas contemporáneas

En la apuesta de Produccions de Ferro (Toni Gomila, Fàtima Riera, Cristina Bugallo, Carme Amengual y Oliver Auclair) por cuidar la autoría local, destaca el ciclo Literactua: un experimento que surge de la colaboración con la Fundació Mallorca Literària y que vive este año la segunda edición.

Tres adaptaciones de tres novelas de autoría balear y contemporánea: Ya se estrenaron El rei de la Selva, de Gabriel Galmés, y Les possessions, de Llucia Ramis, adaptadas por Carme Planells y Xavier Uriz respectivamente, y el jueves pasado llegó el turno de Cap d’Hornos, de Neus Canyelles (prolífica y exquisita), con dramaturgia de Agnès Llobet y dirección de Sergio Baos. Los intérpretes de la tres piezas son Joan Miquel Artigues, Marga López y Sara Sánchez.

No debe haber sido fácil el trabajo de Llobet (ha tenido que compaginarlo con el rodaje en Madrid de la nueva serie de Atresmedia, Sueños de libertad): podar el libro original, extraer la esencia con la mente situada en la puesta en escena, captar-respetar la intención de la obra... Una historia de amor-dolor, relación en permanente desequilibrio por el lastre de la diferencia de edad, de energía vital y de objetivos. Si hablamos de argumento y texturas, hay pasión y toxicidad en esos primeros desvelos –que avanzan un tour emocional por etapas–, hay reproche y deconstrucción y descenso a los infiernos, pero también ternura y miradas felices en los 50 minutos que dura la síntesis. Si explicamos el trabajo del equipo, hay que subrayar el ritmo que impone la dirección de Baos –un hallazgo el juego de los ecos y los espejos, por ejemplo– la precisión de las actrices y el actor y la intensidad con la que se emplean en los momentos álgidos. Y todo eso con tan solo dos semanas de ensayos. Una proeza. Apuntad los próximos bolos: el viernes 12 en Santa Margalida, el sábado13 en el Club Pollença y 14 en el Teatre La Unió de Son Servera).

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