Cuéntame un cuento

Acercar la música al público infantil y juvenil es, desde su creación en 1989, uno de los pilares de nuestra formación sinfónica. Y por varios motivos, uno de los cuales es el de fomentar la Cultura y la música sinfónica en particular a todos los públicos y en especial a los que serán los aficionados del mañana, los que llenarán las salas de concierto.

Así pues, siguiendo esa línea divulgativa, tuvieron lugar, la pasada semana en el teatro Trui de Palma y en el Auditori de Manacor, diversas sesiones matinales para estudiantes de primaria y secundaria de los centros escolares que quisieron aprovechar la ocasión.

En el programa, una única obra: El pájaro de fuego de Igor Stravinski, una partitura que, en principio uno puede pensar que no es la más apropiada para ese público, pero que, visto y escuchado el resultado, sí que resulta del todo apta para niños y jóvenes. Un mérito que hay que repartir entre diversas partes: en primer lugar la partitura, pues si bien es música del siglo XX (fue estrenada en forma de ballet en el año 1910) está llena de melodías y ritmos que atraen, además de tener una duración en torno a la media hora, en segundo lugar a los responsables de la forma con la que fue presentada, con una directora y unos músicos muy metidos en el ambiente escolar, sabiendo perfectamente cuál era su público y en tercer lugar a la narradora, Belén Otxotorena, espléndida tanto en el decir como en el actuar sobre el escenario. Todo eso, ese cóctel musical, hizo que los alumnos que asistieron a la representación del pasado jueves (la que comentamos) estuvieran atentos desde el principio hasta el final.

No importa si la historia que se contó no se ajustaba a la que se muestra en el ballet, da igual, pues el resultado fue magnífico: los asistentes marcharon con algo más de sabiduría musical, gracias a un trabajo colectivo muy bien hecho, muy bien explicado y muy bien interpretado, pues es obligado destacar que nuestros profesionales, los miembros de la orquesta, y la directora se entregaron por completo, igual que lo hubieran hecho si de un concierto de temporada se hubiera tratado. Finalmente debemos dar la enhorabuena a los maestros y centros escolares que quisieron aprovechar esa ocasión y llevaron a sus pupilos a los conciertos. 

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