Todas las personas sufrimos cambios emocionales. Momentos en los que nos encontramos más animados y otros en los que estamos más abatidos. Todo ello entra dentro de la normalidad, pero al igual que en cualquier otro problema emocional puede llegar a un punto en el que se complique y entre dentro de un trastorno de la salud mental. En este caso hablamos de la ciclotimia.

Cuando una persona sufre ciclotimia tiene unos periodos de tiempo donde su estado emocional tiende a la depresión, y otros periodos que se caracterizan por euforia. Estos cambios en el estado de ánimo no suelen ser percibidos por la propia persona que los tiene.Los síntomas, en función de la fase en la que nos encontremos son:

Síntomas Fase de euforia: Aumento de la actividad, Agitación, Energía intensa, Gastos excesivos, Búsqueda del éxito, Optimismo extremo, ...

Síntomas Fase de depresión: Tristeza, Ansiedad, Sentimiento de culpabilidad, Cansancio, Falta de motivación, Falta de concentración, Irritabilidad, ...

Cuando estos cambios de fases se presentan durante al menos dos años, se puede considerar ciclotimia. En el caso de los niños y adolescentes, se diagnostica si los síntomas se presentan como mínimo durante un año.

En opinión del Dr. Carbonell es importante acudir a profesionales de la salud mental si nos encontramos en esta situación, ya que un tratamiento combinado (fármacos y terapia psicológica) nos ayudará a estabilizar el estado de ánimo y encontrar un equilibro en la vida de la persona que lo padece.