Bouvard y Pecuchet recorren Madrid

Esther García Llovet (Málaga, 1963) llegó al podio del premio Herralde de Novela con su novela breve Cómo dejar de escribir, que editó Anagrama hace cinco años, pues aunque no ganó ni quedó finalista, en la última deliberación el jurado recomendó su publicación.

No desatinó, pues García Llovet, residente en Madrid desde la niñez, despliega con poderosa energía una prosa escueta y descarnada, desprendida de alharacas literarias, para narrar el deambular sin norte, un caluroso verano en Madrid, del hijo del gran Ronaldo, un escritor chileno fallecido, amante de las novelas voluminosas, que parece un guiño a Roberto Bolaño, una de sus influencias, como también lo es Foster Wallace.

Pero en esta novela habría que mencionar también El gran momento de Mary Tribune, la obra maestra de Juan García Hortelano, también un desnortado ir y venir por Madrid de unos personajes absortos en sus amores y juergas, y con una prosa muy especial, como la que maneja la escritora malagueña, aunque no sea idéntica.

Como en la obra de García Hortelano, también en Cómo dejar de escribir está presente la obsesión del protagonista, Renfo, por una mujer, la atractiva Claudia, pija e inalcanzable.

Renfo se hace acompañar por Curto, un exconvicto, y por VIPS, parado de larga duración, a modo de Bouvard y Pecuchet o Laurel y Hardy, con los que persigue la sombra de su padre, en forma de una mítica e ilocalizable novela inacabada, «sin saber muy bien qué hacer con toda esta materia prima que el universo nos pone delante de las narices».

Frases cortas, episodios oníricos e irónicos un ritmo trepidante a ninguna parte que logra que todas las piezas encajen al final. Informa la solapa del libro de que la autora prepara su primer largometraje como directora. Habrá que estar atentos por si también con el séptimo arte se maneja tan bien.

Trama: Renfo, hijo apócrifo del gran Ronaldo, mítico escritor latinoamericano, deambula por Madrid tras el manuscrito perdido de su padre. Acompañado de Curto, un amigo exconvicto, y Vips, un parado de larga duración, recorre la ciudad durante un verano tórrido animado por niñas pijas, coches robados y fiestas.

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