Síguenos en redes sociales:

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Memorias de la cocina

En todas las religiones existen alimentos sagrados, costumbres culinarias relacionadas con ellos o alimentos prohibidos de forma permanente o temporal. Todo ello ofrece una dimensión religiosa o espiritual a la gastronomía.

Sobre este fenómeno existen serios estudios que analizan los ejes comunes a todas las religiones, como por ejemplo el ayuno, el compartir con los menesterosos la comida o iniciarla con una plegaria, como era costumbre en las mesas de la mayoría de hogares de la isla hasta hace poco; una práctica que sigue vigente tanto entre algunas familias mallorquinas como en las de otras de culturas lejanas.

Este nexo entre las religiones tradicionales (judaísmo, cristianismo, islamismo, budismo o hinduismo) tiene varios elementos con cierta simetría: el ayuno, las prohibiciones de algunos alimentos o las celebraciones gastronómicas festivas. En la mayoría de creencias, por no decir en todas, se otorga una especial importancia al consumo de vegetales (en la cristiana durante la cuaresma), seguramente fruto de la sabiduría popular que sabía, desde hace milenios, de los estragos del exceso en el consumo de grasas y la bondad de una alimentación equilibrada (con cereales, legumbres, frutas y verduras) que, al margen de las creencias, purifica el organismo. Hoy, en todos los ámbitos nutricionales -al margen de las creencias- estas recomendaciones siguen vigentes.

Esta es una noticia premium. Si eres suscriptor pincha aquí.

Si quieres continuar leyendo hazte suscriptor desde aquí y descubre nuestras tarifas.