Desde hace dos semanas Mallorca es un poquito más rusa y menos alemana. El magnate del acero Alexei Mordashov elevó su presencia en el grupo TUI AG hasta copar el 25% de los títulos, convirtiéndose en el mayor accionista individual.

El touroperador que más viajeros envía a la isla se ha escorado hacia los Urales y Mordashov ha considerado oportuno pasar revista a los hoteles de los que es socio. Mordashov (1965, Chrepovets) aterrizó el martes por la noche en Mallorca y hoy prevé visitar cinco o seis establecimientos en los que TUI comparte propiedad. Para desplazarse de un lado a otro de la isla, el oligarca ruso empleará un helicóptero.

La mayoría de los empresarios mallorquines que se reunirán estos días con Mordashov nunca antes habían visto cara a cara al joven potentado. Quizá Abel Matutes estrechó su mano cuando le vendió su parte de TUI por 70 millones de euros. Esta cifra contribuyó una pizca a afianzarle en el segundo puesto de los hombres más ricos de Rusia, sólo superado por Vladimir Lisin, el otro multimillonario del acero y las minas.

La revista Forbes atribuye a Mordashov una fortuna próxima a los 18.500 millones de dólares, la 29ª del mundo. Para dar idea de la magnitud de su patrimonio, multiplica por doce al del mallorquín Gabriel Escarrer (Meliá International Hotels), quien se codea con los quince más ricos de España.

El magnate de la región norteña de Vologda Oblast es el dueño de Severstal, el productor de acero más potente de Rusia y quinto del mundo, con presencia en Europa, África y Estados Unidos. A finales de agosto Mordashov recibió la grata noticia de que su empresa había triplicado sus beneficios en el segundo trimestre del año gracias al repunte de los precios del carbón y los metales.

Un regalo anticipado para un hombre que cumplirá 46 años el próximo lunes. Hijo de un obrero de acería, divorciado y con tres hijos, se graduó con matrícula en el Instituto de Ingeniería y Economía de San Petersburgo. Aprovechó los vientos de la perestroika soviética –participó en los clubes de entusiastas– y las privatizaciones de las empresas estatales le pillaron bien situado: era su director financiero de Severstal. A través de una compañía subsidiaria consiguió la mayoría de las acciones y desbancó a su jefe, Yuri Lipukhin. En una entrevista a la revista Itogi, confesó: "¿Fue injusto? Sí, pero, porque fue un propietario honesto, debo asegurarme de que no me reprocharán la privatización de la empresa. Quiero probar que lo hice por algo".

Alexei Mordashov mantiene una estrecha relación con los actuales gerifaltes de la Administración rusa, pero sin olvidar a los viejos camaradas. Especial ligazón la que conserva con Anatoli Chubáis, el padre de las privatizaciones y la consiguiente aparición de los magnates.

Al alza

El interés del oligarca por el turismo ha acelerado la expansión de TUI hacia Rusia, donde ha creado una división de negocio para este país y Ucrania (TUI Russia & CIS ). La cifra de viajeros eslavos llegados a España este año "sobrepasará el millón de visitantes", lo que supone el doble que en 2010, según los datos del embajador de Rusia en España, Alexander Kuznetsov. El turismo ruso se ha convertido en una de las grandes novedades en la actual temporada en Balears, principalmente, por su espectacular crecimiento, impacto económico y demanda de hoteles de gama alta.

Mientras crece la llegada de compatriotas, Mordashov se consolida como referente del grupo alemán. Sin sobrepasar el 30% del capital de TUI, que le obliga a hacer una oferta sobre el total de las acciones, el rey del acero se ha erigido en el principal apoyo del consejero delegado Michael Frenzel, un asiduo de Mallorca con chalé en Santa Ponça. Mordashov y Frenzel forman la pareja de referencia para los empresarios mallorquines, siempre que el ruso no diga lo contrario.