Los Bombers del Consell claman contra los recortes. Los trabajadores de este servicio de emergencias denuncian que los tijeretazos les están dejando bajo mínimos y ponen en serio riesgo la atención que prestan a los ciudadanos. Explican que sus perros adiestrados solo participan en los rastreos si sus guías están de guardia, por la negativa de la dirección a pagarles horas extra. También critican que no pueden utilizar los nuevos desfibriladores, almacenados desde hace meses, porque no han recibido la formación, y que se ha bajado el listón en las pruebas de admisión de los interinos. El director insular de emergencias, Francesc Amengual, reconoció ayer que los Bombers han sufrido recortes, pero negó que estos "repercutan en su trabajo o el servicio que prestan a los ciudadanos".

El operativo de búsqueda de una anciana de 75 años que desapareció el pasado domingo en la zona de Cas Xorc, entre Sóller y Deià, ha incrementado el malestar en el cuerpo. Los Bombers cuentan con cinco perros, adiestrados a nivel particular por los propios trabajadores, que han demostrado su aptitud en varias operaciones de rastreo. Pero según fuentes del sindicato CCOO, la dirección insular de Emergencias no quiere pagar horas extras a los guías, por lo que solo están operativos cuando el bombero en cuestión está de guardia. Por eso los tres perros de los Bombers no se incorporaron a la búsqueda de la anciana hasta 40 horas después de la desaparición, según los trabajadores. Y fue precisamente uno de estos tres canes el que, en apenas media hora, dio con ella el martes por la mañana.

El director insular de emergencias, Francesc Amengual, afirmó ayer que los Bombers no cuentan con una Unidad Canina profesional, y que se trata de animales personales de los trabajadores a los que se facilita la manutención. "Son cinco perros y para tener un servicio profesional necesitaríamos 15", afirmó Amengual. Según dijo, los perros no se unieron antes al operativo en Sóller por cuestiones técnicas y no económicas, y añadió que "ocho de los 17 bomberos que participaron sí cobraron horas extra". Añadió que el lunes había otros tres perros de la Guardia Civil y de Protección Civil participando en la búsqueda y se optó por no llevar a los de los Bombers hasta que aquellos no terminaron su turno. Sin embargo, miembros de los equipos que tomaron parte en la operación afirmaron que lo mejor habría sido contar con todos los animales desde el primer momento y añadieron que el can del instituto armado, que acabó agotado, está especializado en búsquedas en áreas grandes y que de los dos de Protección Civil, uno fue retirado por su comportamiento agresivo y el otro no servía "para nada".

Cobrar por los simulacros

Desde CCOO denuncian que el Consell se mostró dispuesto a pagar las horas extras a los guías para participar en un simulacro, a lo que estos se negaron, y que en cambio no quiera hacerlo cuando hay vidas en juego. Además, apuntaron que los bomberos que cuentan con estos perros acuden a veces a las búsquedas como voluntarios civiles, ya que no se les requiere de manera oficial.

Otro caballo de batalla es el de los desfibriladores. Los trabajadores denuncian que el Consell adquirió hace varios meses cinco aparatos, que siguen almacenados y sin repartirse a los parques. El sindicato asegura que este material es necesario tanto para auxiliar a excursionistas con problemas cardiacos como para poder atender a bomberos que pudieran padecerlos durante un servicio. De los 200 bomberos que hay en plantilla, solo 70 han recibido formación para utilizarlo. Amengual alegó que se ofertaron 125 plazas que no se cubrieron. "Aunque estos cursos son obligatorios, no podemos llevarles al aula a la fuerza", aseguró.

Los bomberos aseguran también que se está creando una bolsa de interinos "temeraria", en la que apenas se exige un curso de formación de 200 horas para presentarse, cuando la última promoción del cuerpo en 2011 había superado uno de 600. Apuntan que el Consell pretende con ello poder hacer frente a hipotéticas faltas de personal como las sufridas a finales de 2012, que llevaron a cerrar durante varios días los parques de Felanitx y Sóller. Amengual replicó que las horas de formación mínimas no están legisladas y que en este caso se consensuó con un sindicato.